Aunque otras preguntas tuvieron mayor publicidad, como el caso del horario de cierre de las botillerías, o el cambio de nombre al cerro Santa Lucía, el proceso de consulta ciudadana de la Municipalidad de Santiago incluyó el uso de bolsas biodegradables.
En ese sentido, el 87% se manifestó a favor de eliminar las bolsas que no tuvieran esa cualidad. La alcaldesa, Carolina Tohá, explicó que la idea es crear una ordenanza, previa consulte a los actores involucrados en el tema, que prohiba paulatinamente el uso de bolsas biodegradables, primero en el comercio mayorista y luego se haga extensiva a la totalidad de los locales de la comuna.
Aunque la consulta sostiene que hay un plazo de 5 años, Tohá busca acelerar el proceso y espera que en enero de 2015 la ordenanza pueda ser sometida al voto del concejo municipal para que se de inicio al proceso.