Luis Jara está pasando por un gran momento profesional, y eso quedó más que demostrado en su retorno a la Quinta Vergara.
Es que el cantante nacional regresó al Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar la noche de este miércoles para cerrar la tercera jornada del evento musical. Allí continuó con la celebración de sus 30 años de carrera musical.
Pasada las 2 de la madrugada, el también rostro de Mega apareció en escena cantando "Cerca" y de ahí siguió con una batería de éxitos (como "Ámame", "Mañana" y "Un golpe de suerte"), pero, ante todo, con un show marcado por su buen humor y sus ganas de conversar con el público, ese mismo que a esa hora de la noche no se movió de la Quinta Vergara para esperarlo, tras las presentaciones de Alejandro Sanz y Natalia Valdebenito.
Jara se dio el lujo de cantar parte de un tema en inglés (en "Amor prohibido") y de reírse de sí mismo, como cuando se puso en pantalla gigante una fotografía de él del pasado y le pidió a la gente que encontraran las diferencias entre antes y ahora, para luego agregar que lo mejor no era hacerse operaciones, sino que aceptarse tal cual uno es.
Así fue la tónica del show de un Luis que se mostró emocionado y alegre en su retorno al escenario en que no estaba desde 2007 y en una versión en la que también destaca como miembro del jurado.
Su show le valió irse con las Gaviotas de Plata y de Oro, las cuales fueron pedidas insistentemente por un público que lo ovacionó durante toda su presentación. Y, siguiendo en su estilo de hacer humor, él mismo dijo que el público le daría Gaviota de Oro, autoentregándose el premio tras intensos gritos de la gente porque así fuera.
"Muchas gracias por aguantarme, por quererme y por aceptarme", señaló un Luis Jara que dejó la Quinta Vergara con la sensación de misión cumplida en una noche que él definió como "única e irrepetible" y que finalizó con él en el backstage celebrando junto a sus hijos y esposa.
[FOTOS] Las imágenes que muestran cómo Luis Jara tuvo a la Quinta Vergara rendida a sus pies