El zoológico de Singapur, junto con Night Safari, Jurong Bird Park y River Safari, ha cerrado desde el inicio del Circuit Breaker el 7 de abril.
Pero un grupo de pingüinos africanos del zoológico se ha aprovechado de las instalaciones vacías durante este período. El cierre le da a los pingüinos la oportunidad de dar un paseo y explorar las áreas fuera de su exhibición a gusto.
Según medios locales, estas caminatas también sirven como una forma de enriquecimiento, permitiéndoles descubrir nuevos espacios, imágenes y sonidos que los mantienen estimulados mental y físicamente.
Los guardianes los vigilan de cerca durante sus caminatas para guiarlos, y harán un recuento para asegurarse de que todos los individuos estén presentes.
Los pingüinos africanos están actualmente clasificados como en peligro por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza debido a los derrames de petróleo y la pérdida de hábitat para los sitios de anidación.