Justin Bieber subió al escenario para cantar una canción gospel en la iglesia Churchome en Beverly Hills. El cantante se emocionó durante su interpretación de "Never Would Have Made It" de Marvin Sapp, y fue visto llorando antes de su actuación.
Una fuente aseguró a ET, que Bieber estaba muy emocionado mientras se preparaba para cantar la canción. El músico fue visto llorando, diciéndole a la multitud que estos dos últimos años han sido muy duros para él.
Según el testigo, Bieber estaba nervioso de subir y cantar porque no quería que la gente pensara que era un concierto.
Al día siguiente, compartió un video de la actuación en Instagram. "Cante en la iglesia anoche. Dios me está atravesando una temporada difícil. Tener confianza en Jesús en tus peores momentos es lo más difícil. Pero él es fiel para completar lo que comenzó", declaró en la publicación.
Y agregó: "También quiero agradecer a mi esposa por ser un gran apoyo en mi vida durante esta temporada ... dice en la biblia contar TODO ALEGRÍA cuando enfrentas pruebas de varios tipos. Suena loco teniendo en cuenta que cuando te enfrentas a pruebas te sientes terrible. Pero si estamos agradecidos y adoramos a Dios por lo que tenemos en esa temporada, hay tanto poder en eso ... ¡cualquier dolor que estés sufriendo solo sigue diciéndote ESTO NO VA A DURAR! Los amo, muchachos, en esto juntos".
Su publicación obtuvo muchos comentarios de apoyo de fanáticos y celebridades por igual, incluida su esposa, Hailey Baldwin.
"Tan orgullosa de quién eres", respondió Baldwin.
Y aunque esta actuación no indica necesariamente un regreso del cantante a la música, poco después de que subió al escenario, Bieber tuiteó, "Late night studio", lo que provocó un frenesí en sus creyentes sobre la posibilidad de música nueva.