Fue durante las actividades del día de los enamorados en la comuna de Maipú donde Roberto y Lucila se comprometieron para celebrar su matrimonio, sin saber que en los próximos meses, se convertirían en los protagonistas de una nueva historia del programa de Canal 13, "Contra viento y marea".
Sin embargo, la historia de ambos no ha sido fácil. Ellos han tenidos que luchar contra las dificultades en sus familias por el anuncio de su enlace y además por la discriminación, que diariamente, viven debido al síndrome de Morquio, enfermedad relacionada a su baja estatura como son los problemas en sus huesos y otras derivadas como problemas en la audución, por ejemplo.
Por otra parte, ellos deben enfrentar la discriminación para obtener un trabajo, del rechazo en la accesibilidad en edificios o de infraestructura en la ciudad y del respeto por su condición por parte de los transeúntes y las personas en las calles.
Para olvidar por un momento esta triste realidad y permitir que los preparativos de su matrimonio sea un sueño, Francisco Saavedra acompañó a Lucila a la prueba de su vestido de novia, cortesía de la alcaldesa de Maipú, Cathy Barriga.
Una vez con el vestido puesto, Lucila no pudo contener su emoción y expresó su alegría por el momento. "Es algo que hace mucho tiempo había soñado pero no sabía si lo iba a cumplir".
Además, reconoció que en esos momentos pensaba en quien ella indicaba como su madre, su abuela, quien se hizo responsable de su crianza y la defendía de las crueles burlas por su estatura.
"Ella va ser tu ángel, tu guardián toda la vida. Tú dedícate a ser feliz. Y no aguantes que absolutamente nadie te pase a llevar. Eres una linda mujer y mereces ser feliz", fueron las palabras de Pancho Saavedra le dedicó a Lucila en ese emotivo momento.
Y para completar el atuendo de la novia, la edil de Maipú tenía otra sorpresa. Le entregó un par de zapatillas "enchuladas" por la misma alcaldesa para llegar radiante al altar, junto al infaltable ramo de flores.