Todos los padres creen que sus padres son especiales y los más inteligentes, pero una pareja que vive en el condado de Cheshire, en Inglaterra, tiene pruebas para demostrarlo.
Caroline y Nick no podían creer que el pequeño Charlie, de tan solo ocho semanas, estaba diciendo sus primeras palabras, por eso tomaron rápidamente un teléfono y grabaron a su hijo diciendo “Hello” (Hola) a medida que se lo pedía su padre.
Según informaron medios locales, la sorprendida madre señaló que “Fue mágico. Teníamos lágrimas en los ojos. ¡Estábamos en estado de shock!”.
Charlie es el segundo hijo del matrimonio, quienes primero tuvieron una niña llamada Lottie, quien también habló prematuramente, pero a los seis meses de vida, algo muy sorprendente tomando en cuenta que los bebés dicen sus primeras palabras aproximadamente a los 11 meses.
"No teníamos idea de la rapidez con la que los bebés aprenden a hablar cuando tuvimos a Lottie, ya que no teníamos otros hijos con los que comparar su progreso. Cuando Charlie comenzó a hablar, supimos que era muy pronto para él y definitivamente raro", contó Caroline.