En sólo 30 segundos, un hombre cortó una cuerda que llevaba incrustada en su cuerpo por años.
Una interacción muy especial protagonizó un buzo y un tiburón ballena en el fondo del mar.
Una cuerda de un barco comercial que cayó al océano se transformó en un peligro para el ejemplar, cuando la atadura comenzó a rodear su enorme cuerpo y a incrustrarse en su piel.
El animal no tenía ninguna posibilidad de librarse por sí solo de la cuerda, que ya llevaba mucho tiempo en su cuerpo. Pero por suerte, un buzo cercano vio la posibilidad de cortar la atadura del cuerpo de la ballena.
Y sorpresivamente, el animal cooperó en la tarea. En sólo 30 segundos, el buzo consiguió cortar la atadura de su cuerpo, liberando al animal del que habría sido por años un terrible sufrimiento.
Revisa el video:
Etiquetas de esta nota