Existen numerosos mitos con respecto a las celebridades, dentro y fuera de sus espacios de trabajo. Rebuscadas exigencias como el supuesto mandato de esa estrella de la canción mexicana que pediría no mirarlo a los ojos.
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Pues bien, Tom Cruise cuenta con una muy insólita, la que fue revelada por la actriz Annabelle Wallis ("Peaky Blinders").
La intérprete británica de 35 años fue la co-protagonista en "La momia" (2017) del nominado al Oscar en tres oportunidades. La película formaría parte del fracasado y monstruoso Dark Universe de Universal, pero las críticas despiadadas y los números en la taquilla hicieron retroceder a los estudios cinematográficos.
En entrevista con The Hollywood Reporter, Wallis recordó su trabajo con Tom Cruise y comentó aquella exigencia que la dejó marcada durante el rodaje: "Él está en un nivel diferente y me marqué una meta. Corrí en pantalla con él, pero me dijo al principio que no. Me dijo: 'Nadie corre en pantalla conmigo'".
Las corridas del actor de 58 años en la pantalla grande son parte de su sello dentro de las cintas de acción, pero era inimaginable que fuesen parte de una exclusividad.
Aún así, Annabelle Wallis explicó cómo lo convenció de lo contrario: "'Bueno, soy una buena corredora' —pensó—. Así que, cronometraba mi cinta de correr para que él entrara y me viera correr. Y luego añadió todas estas escenas de correr. Así que, así fue. Pensé que era mejor que un Oscar".
La película dirigida por Alex Kurtzman recaudó US$ 400 millones en las salas, situación que, increíblemente, no fue suficiente para que Universal le diera un espaldarazo a la franquicia de monstruos.
