Una imagen increíble se ha hecho viral recientemente. Sophie Powers, maratonista británica de 36 años que participaba del Ultra-Trail du Mont-Blanc (UTMB), maratón de cerca de 172 kilómetros (40 horas aproximadamente), amamantó a su hijo en mitad de la carrera.
Su hijo de tres meses, Cormac, debe ser alimentado cada tres horas. La estrategia de Powers era que su marido la esperase en cada puesto de ayuda para que le entregara leche mediante un extractor.
Pero Powers se demoró alrededor de 16 horas en llegar a Courmayeur, lugar donde la esperaba, por lo que se vio obligada a hacer una pausa y amamantar a su hijo en plena competencia.
El momento fue inmortalizado por Alexis Berg, fotógrafo de Strava, red social enfocada en deportistas de alto rendimiento. “Lo que es excepcional, por supuesto, no es la foto, pero es ella, en toda su fuerza”, escribió Berg, en la descripción de una publicación de Instagram.
Luego del hecho, Powers también dejó un mensaje a través de la misma red social, en la que recalcó la importancia de la lucha que implica ser madre.
“Pero esta no es una historia sobre mí. Es una historia sobre la lucha diaria de ser una nueva mamá. Una historia sobre la necesidad de nutrir a nuestros bebés lo mejor que podamos. Y la importancia de priorizar nuestra salud física y mental, ser nosotros mismos y ser madre”, dice Sophie Powers a través de su Instagram.
“Me he sentido abrumada por la positividad y los mensajes de apoyo. Son para todas las madres porque estamos en esto juntas”, sentencia.
Sophie Powers llegó a la meta tras 43 horas y 33 minutos.