Quién iba a imaginar que un químico analítico alemán, a sus 25 años, fuese el responsable de dar una explicación lógica a la adicción al café, ese brebaje que todos han probado y utilizado para diversos fines, entre ellos, mantenerse activo y despierto.
Este antecedente podemos conocerlo gracias al doodle con que Google nos sorprende hoy, para celebrar el aniversario número 225 de Friedlieb Ferdinand Runge, un químico analítico nacido en las afueras de Hamburgo en 1795.
A una edad temprana, Runge comenzó a demostrar su interés por los experimentos. Esto lo llevó a descubrir, casualmente, el efecto midriático de la belladona luego de que una gota de extracto salpicara en su ojo, notando el efecto dilatador en su pupila.
Años después, cuando cursaba sus estudios en la Universidad de Jena, reprodujo los efectos de esta planta en una demostración para el escritor y erudito Johann Wolfgang von Goethe, quien quedó impresionado por las capacidades del joven químico.
Fue debido a esto que Goethe le entregó una bolsa de granos de café, los que más adelante procedió a analizar para, finalmente, aislar el ingrediente más importante que lo compone: la cafeína.
Sin embargo, ese descubrimiento es tan solo uno entre tantos, ya que Runge también inventó el primer colorante de alquitrán de hulla y un proceso para teñir la ropa, además de aislar la quinina, compontente esencial para tratar la malaria.
Incluso ideó un sistema para extraer azúcar del jugo de remolacha.