El pasado domingo 6 de marzo una fotografía mostró, en primera plana, el horror que se vive en Ucrania en el marco del enfrentamiento bélico que mantiene con Rusia.
Una imagen publicada por el diario The New York Times en su portada mostraba a dos adultos y dos niños, muertos a un costado del monumento por los caídos en la Segunda Guerra Mundial ubicado en la ciudad de Irpín. Solo minutos antes, el mismo medio había registrado en video cómo un misil aparentemente ruso había caído en la zona donde civiles intentaban abandonar la ciudad, matando a estas personas.
[VIDEO] Guerra en Ucrania: Familia murió por impacto de misil en Irpín
Unos días después del hecho se conocieron más detalles de la malograda familia. Serhiy Perebyinis confirmó al mismo The New York Times que su esposa Tetiana (43) y sus hijos Mykyta (18) y Alisa (9) eran las personas que aparecían fallecidas en la imagen. La cuarta víctima fue identificada como Anatoly Berezhnyi de 26 años, un voluntario de una iglesia del lugar que ayudaba a la familia a salir de ciudad.
“Reconocí el equipaje y así fue como lo supe”, dijo Serhiy sobre cómo se enteró que su familia había muerto al ver una imagen del ataque en Twitter. El padre no acompañaba a su esposa e hijos ya que estaba en el este del país cuidando a su madre enferma.
El plan era salir de la ciudad
Perebyinis explicó que vivían en un departamento en las afueras de Kiev y tenían una vida normal. Incluso, tenían dos perros, de los que uno fue rescatado con vida tras la explosión pero terminó muriendo por sus heridas.
Sin embargo, su tranquilidad cambió cuando misiles empezaron a caer en su vecindario. Eso hizo que la mujer decidiera mudarse al sótano con sus hijos, ya que su marido ya estaba en el otro lado del país.
A pesar de no estar la familia entera, los padres decidieron que Tetiana huiría de la ciudad con los niños y sus mascotas e. Estaban en eso cuando ocurrió la tragedia.
“Le dije: ‘Perdóname porque no pude defenderte’”, dijo. “Traté de cuidar a una persona, y eso significa que no puedo protegerte”, dijo entre lágrimas el hombre recordando la conversación que tuvo un día antes de la muerte de su familia.
“Ella contestó: ‘No te preocupes, saldré de esto’”, agregó.