La Luna es la protagonista del cielo en estas noches.
Esto se debe a que es la más grande y brillante de los últimos 70 años porque se ubica en el punto de su órbita más cercano al planeta Tierra.
El satélite natural no se aproximaba tanto a la Tierra desde 1948 y no planea volver a hacerlo hasta 2034.
Pero lo que al público en general puede asombrarle y disfruta contemplar, no siempre es del total agrado de los científicos.
Alboroto
La Luna llena,y por descontado la superluna, no resulta ser la fase favorita de los astrónomos cuando de observaciones se trata.
"Los astrónomos generalmente prefieren tener un cielo oscuro porque tratan de recolectar la luz de objetos muy distantes como estrellas y galaxias", explicó Jean-Luc Margot, profesor de Astronomía de la Universidad de California, Los Ángeles (EE.UU.).
"Entonces cuando la Luna está brillante en el cielo dificulta el trabajo de los astrónomos para recolectar la información", señaló Margot a BBC Mundo.
Otra de las razones por las cuales a algunos los astrónomos no son muy amantes de la superluna, que en concreto es un 30% más brillante que una Luna llena regular, es por toda la atención que se lleva.
"La diferencia entre la superluna y la Luna llena es muy sutil para el público en general por lo que los astrónomos sienten que se está haciendo mucho alboroto sobre algo menor", opinó Noah Petro, científico investigador del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA.
Entonces, ¿cuál es el mejor momento para observar la Luna y por qué?
Depende cuál sea el propósito.
"Si quieres realizar observaciones del cielo nocturno, la Luna nueva es la mejor fase. Porque el satélite no está visible en la noche", aseguró Margot.
Pero si la idea es apreciar directamente al astro, la cosa es totalmente distinta.
"Astrónomos amateur y aquellos interesados en fotografiar la Luna, en general prefieren la fase que va entre la nueva y la Luna llena.
"Allí se puede ver la línea divisoria entre el área brillante de la luna y el que se encuentra en las sombras y con ello se puede apreciar su topografía, con las montañas, cráteres, etc.", analizó el profesor de la Universidad de California.
Pero pese a las críticas de los científicos, ambos coinciden que estás noches son la excusa perfecta para mirar hacia el cielo.
"Espero que la superluna anime a la gente a salir y mirar la Luna, incluso a otros objetos y que esto capture su atención para mirar al cielo de nuevo en un futuro", le dijo Noah Petro, de la NASA, a BBC Mundo.
Y tú, ¿saldrás a mirarla?