Los dueños de perros son propensos a hacer más ejercicio que aquellas personas que no tienen estas tiernas mascotas.
Un estudio publicado en abril por la revista Nature sugiere que tener un can puede influir en cuánto ejercicio haga su dueño.
El estudio fue realizado en una comunidad en el Reino Unido, donde participaron cerca de 700 personas.
En general, los dueños de perros pasan casi 300 minutos a la semana caminando junto a su mascota, lo que es casi 200 minutos más que lo que caminan las personas que no tienen.
Hombres y mujeres que tienen estos animales suelen sobrepasar la cantidad de ejercicio recomendada para la salud, establecida en 150 minutos semanales como mínimo.
Además, la gente que tiene canes tiende a salir a trotar, correr, patinar o andar en bicicleta.
Carry Westgarth, una profesora de interacción humana-animal de la Universidad de Liverpool, hace un llamado a no adoptar o comprar un perro solo para que nos obligue a caminar.
"Un perro no es una herramienta para hacernos más activos", dijo a The New York Times, "pero si tienes el tiempo, inclinación y dinero para tomar la responsabilidad de tener un perro, son buenos motivadores para salir a caminar y no podrías tener excusas para no hacerlo".