El can no tuvo buena relación con su familia adoptiva, por lo que la veterinaria que lo trató decidió darle un nuevo destino.
Taka, un shiba inu que resultó quemado en un incendio, entrena para llegar a ser terapeuta para personas que, como él, sean víctimas de incendios.
Taka tiene nueve años y sufrió graves quemaduras en su rostro producto de un incendio.
Tras su recuperación, tenía problemas al relacionarse con otros canes.
Crystal Lesley, veterinaria del hospital animal "Care More" decidió adoptarlo, luego de que no tuviera una buena relación con su familia adoptiva.
"Le encanta ser amado, le encanta que lo acaricien, le encanta la atención. La gente tiene miedo a tocarlo, pero yo les digo 'por favor, tóquenlo'", comentó Lesley.
El perrito ya está trabajando en algunas clínicas, adorando la atención de los pacientes.
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