Una pareja de jóvenes ucranianos se encadenó el día de San Valentín para probar la profundidad de sus sentimientos, ahora, cuatro meses después decidieron romper la cadena y terminar la relación.
Es que una relación de pareja es siempre compleja, pero Viktoria Pustovítova y Alexánder Kudlái decidieron agregar un poco más de presión al encadenarse de las manos, por lo que tuvieron que hacer todo junto, incluso ir al baño, esto duró 123 días, hasta este jueves cuando la pareja pidió que le cortaran la cadena.
La ceremonia de separación fue cubierta por varios medios ucrananos, y no es para menos ya que un representante del Registro de Récord Nacionales de Ucrania, presente durante el evento, confirmó que la pareja ha establecido el récord de duración en esta condición.
Según señaló el medio ruso RT, una vez separados, no pasó desapercibido el estado de euforia que sintieron al poder alejarse. Ambos contaron a los periodistas que desde ahora van a mantener una distancia tanto física como emocional, y la joven incluso se mudará a otra región. Según Pustovítova, pronto reanudará una "vida plena" y espera que su historia "sirva de buen ejemplo para todas las parejas de Ucrania".
Según Kudlái, no se conocían muy bien antes de encadenarse, después de lo cual se dieron cuenta de que tienen "diferentes visiones sobre la vida". "Hemos mejorado la comunicación y nos conocemos completamente. El sentido común nos sugirió que ni Vika ni yo necesitamos esta relación, que solo nos perjudicaría", agregó el joven.
Ahora buscan subastar la cadena que mantuvo a la pareja unida durante los cuatro meses que duró el experimento.
