"Esta es una canción dedicada a los fans de Oasis" dijo Noel Gallagher casi al comienzo de su show en Lollapalooza Chile 2016. Y de inmediato comenzaron a sonar los primeros acordes de "You know we can't go back" (o "Sabes que no podemos volver"), cerrándole la puerta nuevamente a una reunión de la banda.
Eso sí, el mayor de los Gallagher aviva el mito regalando emotivos recuerdos de la banda que lo llevó a la fama, como "Champagne supernova" o la trascendental "Wonderwall", que fue coreada por todo el público presente en el VTR Stage.
Y aunque apareció sobre el escenario 15 minutos después de la hora oficial, comprimió su setlist para comenzar a disparar una batería de éxitos dada por sus dos discos solistas "Noel Gallagher's high flying birds" (2011) y "Chasing yesterday" (2015).
"Everybody's on the run" fue el primer zarpazo, seguido inmediatamente de "Lock all the doors", esa canción como sacada del disco "(What's the story) Morning glory" de Oasis, y que nunca pudo terminar para su antigua banda.
A sus 48 años, el músico de Manchester lleva el ego de acorde a su edad.
Porque pregunta a los asistentes si este es el mejor momento en lo que va de Lollapalooza -obviamente recibe un "Sí" rotundo como respuesta- y aprovecha de completar la jugada con la desfachatez de "In the heat of the moment". Pero eso no le impide pasar al ardor romántico de "If I had a gun...".
Y el gran final aparece con otro clásico de Oasis. "Don't look back in anger" es la oportunidad de sacar los celulares y grabar un pedazo de historia del rock británico, que en manos de Noel Gallagher está perfectamente resguardado.
