El músico nigeriano Tony Allen, batería y creador del afrobeat junto a su compatriota Fela Kuti, falleció este jueves en París a los 79 años, declaró a la AFP su mánager.
"Se desconoce la causa exacta de la muerte", dijo Eric Trosset, quien precisó no obstante que no fue el nuevo coronavirus.
"Estaba en plena forma, fue bastante repentino. Hablé con él a las 13H00 y dos horas más tarde se sintió mal y fue transportado al hospital Pompidou, donde falleció", informó.
El maestro del afrobeat vivía cerca de París.
En los años 1960 y 1970, Tony Allen fue el batería y el director musical de su compatriota Fela Kuti, con quien creó el afrobeat, un género hipnótico y repetitivo que mezcla el estilo highlife, la polirritmia de la yoruba, el jazz y el funk y que se convirtió en una de las corrientes fundamentales de la música africana del siglo XX.
A esta música Fela añadió las letras revolucionarias y panafricanistas que lo convertirían en uno de los símbolos de la lucha por las libertades en África.
Con Fela y el grupo Africa 70 grabó unos cuarenta álbumes, antes de que los caminos de los dos músicos se separaran después de 26 años de colaboración.
Su ritmo era tan intenso que, cuando se fue, Fela necesitó a cuatro baterías para reemplazarlo.
El músico británico Brian Eno definió a Tony Allen como el "mejor batería" de todos los tiempos.
Autodidacta, Allen comenzó a tocar con 18 años y se alimentó del sonido de Dizzy Gillespie y de Charlie Parker, así como de la música africana contemporánea.
Los músicos actuales lo apreciaban. Tocaba la batería en The Good, The Bad and The Queen, uno de los proyectos del exlíder de Blur Damon Albarn.