Yolanda Kakabadse ha hecho una carrera en el mundo de la conservación del medioambiente. Después de cumplir su segundo período como la directora de la WWF (World Wide Fund for Nature), es un referente en solución de conflictos ambientales, así como una constante promotora de la responsabilidad que tiene el hombre con la naturaleza y su cuidado.
Psicóloga de profesión, Yolanda Kakabadse nació en 1948 hija de un padre oriundo de Georgia y una madre ecuatoriana. A principios de los setenta Yolanda pasaba su tiempo libre recorriendo su amado Ecuador. Comenzó a ver los cambios que la naturaleza había tenido tras décadas de turismo local. Menos árboles, lagunas más secas y un territorio que iba perdiendo su exuberante naturaleza.
En 1979 formó la ONG Fundación Natura, cuyo rol es la conservación de la naturaleza ecuatoriana. Aquí Yolanda ejerció como Directora Ejecutiva hasta 1990, convirtiendo a la fundación en una de las más importantes relacionadas con el medioambiente en Latinoamérica.
A principios de los noventa Yolanda viajó a Suiza y se hizo parte del equipo que organizaba la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo en Río de Janeiro en 1992, una instancia que definió un punto de reflexión sobre el devenir del desarrollo. El rol de Yolanda fue la coordinación de las organizaciones civiles que nunca habían sido parte de este instancia, como grupos indígenas, movimientos juveniles y la asociación de carpinteros de MNepal, entre otros. Tras esta instancia, Yolanda se puso a pensar en su propio país y lo que faltaba para ponerse al día con el medioambiente, por lo que en 1993 formó su segunda ONG, Fundación Futuro Latinoamericano, para entregar las capacidades, liderazgo y condiciones para que los países latinos se encaminen hacia un desarrollo sustentable.
Debido a su impecable gestión le llegó el ofrecimiento de ser ministra de Medioambiente de Ecuador en 1998. Desde ahí creyó que podría realizar un verdadero cambio a nivel político, sin embargo, 18 meses después, la profunda crisis económica y política de Ecuador devino en un golpe de estado.
Yolanda se fue a Estados Unidos donde hizo clases, y siguió participando de temas relacionados al medioambiente codirigiendo hasta 2005 el grupo de trabajo sobre la sustentabilidad ambiental en el proyecto Millenium de la ONU, que buscó soluciones para el desarrollo humano mediante la superación de la erosión de la tierra, deforestación, contaminación y cambio climático.
En 2010 asumió como directora de la WWF, la organización conservacionista privada más grande del mundo que tiene un panda como logotipo. Hoy a punto de terminar su segundo período es una de las voces más respetadas en temas medioambientales, promotora de un pacto climático con un sistema internacional transparente de rendición de cuentas para medir la acción de los países en mitigación, adaptación y financiación. Según Yolanda, la política se debiera hacer cargo del cambio climático y el impacto del hombre en la naturaleza, tal como se preocupa de los problemas económicos y sociales.
