Mujeres Bacanas: Junko Tabei, la conquistadora de cimas
Era la quinta de siete hermanos y decían que era una niña débil. Pero ella, de muy baja estatura y frágil contextura, se enamoró del montañismo; esto no sólo significó los esfuerzos físicos para conquistar cimas, sino que armar un grupo de mujeres escaladoras, ya que en su país la sociedad consideraba que ellas debían sólo buscar a alguien para casarse y servir el té. Junko Tabei fue la primera mujer en el mundo en conquistar la cima del Everest, y luego la primera mujer en conquistar las siete cumbres más altas del mundo, en siete continentes.
Nació en Miharu, al norte de Tokio. Comenzó a interesarse en las montañas tras un paseo escolar al Monte Asahi, cuando tenía 10 años. Pero como no tenía los medios para el deporte, quedo relegado hasta que Tabei, después de estudiar literatura inglesa en la universidad, fundó el Club de Escalada para Mujeres de Japón; el lema del grupo era “Vamos a una expedición al extranjero por nuestra cuenta”, lo que ejemplifica con humor el machismo imperante en la época en la sociedad japonesa. Tabei y sus compañeras del club trabajaron y juntaron dinero para las expediciones, incluso cuando les dijeron que “deberían estar criando hijos en vez”, según contó ella en entrevistas. Su marido, también escalador, cuidaba a sus dos hijos mientras ella iba de expedición.
En 1975, después de reunir fondos, se organizó el grupo de 15 mujeres que intentarían llegar a la cima del Everest, la montaña más alta del mundo. Siguiendo la ruta de Edmund Hillary, que sólo habían emulado una treintena de personas antes que ella, Tabei lideró, e incluso sobrevivió una avalancha que la dejó sepultada y sin conocimiento por unos minutos. Sólo unos días después, Tabei conquistaba la cima como la primera mujer en lograr la hazaña.
Tabei destacaba la mezcla de fortaleza física y mental que hay que tener para el alpinismo, y la confianza y espíritu de grupo. “Necesitas tener una relación que, cuando estás escalando, puedas decir: Necesito ir más lento”. Otra vez comentó: “Aún si es difícil, puedes llegar a la cima más alta de Japón si vas paso a paso”.
Tabei volvió a Japón convertida en una celebridad. Pero quiso ir por más; hizo expediciones a las montañas de más de 70 países y conquistó las siete cumbres más altas del mundo; también fue la primera mujer en hacerlo.
En las últimas décadas, sin dejar nunca de escalar -incluso cuando se le diagnosticó cáncer al estómago en 2012-, se enfocó en trabajo ambientalista, abogando por el descanso y preservación del Everest, que consideraba demasiado abusado y desgastado. Además, trabajaba con jóvenes; todos los años, subía el Monte Fuji con alumnos escolares.
Su última expedición fue hasta ese lugar con adolescentes sobrevivientes de Fukushima; Junko Tabei murió en octubre de 2016.