Desde que llegó a la Familia Real, Meghan Markle ha impuesto estrictas reglas de privacidad, especialmente cuando se trata de ella y de su hijo con el príncipe Harry, Archie.
Razón por la cual no fue una sorpresa que a los fanáticos del tenis se les "ordenó no tomar fotografías de la duquesa de Sussex" cuando hizo una aparición sorpresa en el palco real de Wimbledon el jueves para ver jugar a su amiga Serena Williams.
Sin embargo, Meghan ha sido calificada como "infantil" y "controladora" después de que su equipo de seguridad advirtiera a los espectadores en la Court 1 contra la toma de fotografías de ella, incluso aunque 12.000 personas estaban sentadas en la multitud y millones se veían en la televisión.
El guardaespaldas de Meghan reprendió a un invitado que levantó su teléfono, pero se lo podía ver claramente haciendo una foto de sí mismo con la cancha en el fondo.
A Sally Jones también le llamaron la atención los guardias, pero dijo que el personal de seguridad se quedó "avergonzado" cuando les dijo que estaba tomando una foto de Serena y que no había visto a la realeza.
Jones, de 64 años, que estaba sentada en la misma fila que la duquesa, declaró a Daily Mail que Meghan estaba "mirando a su alrededor para ver quién la estaba mirando".
"Sentí un golpecito en mi hombro y me pidieron que no tomara fotos de la duquesa, pero no tenía idea de que ella estaba allí hasta ese momento. Yo estaba absolutamente atónita", declaró Jones.
Y agregó: "Había alrededor de 200 fotógrafos que le estaban tomando, pero la seguridad fue enviada para advertir a una vieja como yo. Los hace parecer tontos. Es infantil y nos toma por tontos".
Jones dijo que era "otro ejemplo de tontería de control" después de que la pareja enfrentara una reacción violenta por haber decidido mantener en privado el bautizo de Archie y sus padrinos.
Piers Morgan dijo a los televidentes de Good Morning Britain: "¿Una capacidad privada, en Wimbledon? Esto es tan ridículo. Es hipócrita y no son personas privadas, son el duque y la duquesa de Sussex. Si quieres ser privado, vuelve a América y vive en privado".
El Palacio de Kensington no ha comentado sobre el incidente, pero una fuente real aseguró a Telegraph: "No es raro que las personas que acompañan a miembros de la Familia Real en eventos privados o públicos pidan a los miembros del público que no tomen fotografías. Es para permitir que los miembros de la Familia Real se involucren con personas y eventos".
Su equipo de seguridad mantuvo vacíos hasta 40 asientos alrededor de Meghan. A Meghan, quien vestía blue jeans, una chaqueta, anteojos de sol y un sombrero, se unieron sus amigas Genevieve Hillis y Lindsay Roth mientras veían cómo Serena vencía a Kaja Juvan de Eslovenia el jueves.
