Un gran derrame de whisky en el rio Kentucky, en los Estados Unidos, causó un desastre ecológico en la zona, luego de que provocara la muerte de miles de peces.
El derrame se produjo tras un incendio que afectó a una conocida fábrica de bebidas. El contenido de 45 mil barriles, que se destruyeron tras el siniestro, terminó accidentalmente en las aguas del rio.
Como consigna el gabinete de Energía y Medio Ambiente de Kentucky, la presencia de alcohol en el agua disminuyó la concentración de oxígeno, ahogando a su fauna marina.
El área afectada se contabiliza en 28 kilómetros de largo, consistente en peces muertos y whisky, fluyendo en dirección al río Ohio.
Las autoridades plantean oxigenar el agua de los ríos con dispositivos de aireación, para mitigar los efectos del alcohol en los animales marinos.
Aún no hay un informe oficial sobre el daño al medioambiente que provocó este derrame, tampoco una cifra exacta de la cantidad de peces muertos.