La impresión 3D se ha transformado en una gran aliada para el combate del COVID-19 alrededor del mundo, ya que diversas personas han utilizado estas máquinas para crear mascarillas y ventiladores mecánicos que ayudan a evitar y combatir la enfermedad. Asimismo, este método permite una rápida y masiva producción, ayudando a solventar la escasez de estos productos durante la pandemia.
Por ello, un grupo de chilenos decidió utilizar este mecanismo para crear un insumo que según indican cumple una función “2 en 1”, es decir, combina la mascarilla tal y como la conocemos con una pantalla facial que otorga mayor protección al rostro.
Esto se plantea como una solución a uno de los problemas más comunes evidenciados principalmente por los funcionarios de la salud, quienes mediante diversos medios han difundido imágenes de sus rostros con marcas y heridas producto del uso prolongado de estos insumos durante sus largas jornadas de trabajo.
“MaskiGlass” es el nombre de esta innovadora mascarilla que es ergonómica, es decir, se adapta al rostro. Y su uso, por lo tanto, promete evitar o disminuir el impacto dérmico que pueden causar estos elementos.
Según indicó Inclusive3D a T13.cl, “la particularidad radica en el diseño de la MaskiGlass siendo el único que cuenta con doble funcionalidad, puede otorgar protección de las vías respiratorias gracias a lo hermético de la mascarilla como también del cuidado facial debido a la implementación de una mica. Estos elementos pueden ser utilizados en conjunto o se puede optar por solamente la mascarilla, siendo la única que con la capacidad de ser desmontable”.
Además agregan que “la mascarilla está hecha a base de ‘ácido poliláctico’ conocido técnicamente como PLA, que es un material polímero biodegradable cuyo origen son los recursos renovables como el maíz o caña de azúcar”.
La mascarilla también cuenta con un filtro que se puede lavar dependiendo del uso que ha tenido (contacto con el aire exterior).