Los chinos tienen hambre de langostas
Mientras que pepinos de mar, anguilas y camarones normalmente se ofrecen en todo restaurante chino que se precie, las langostas brillaban hasta hace poco por su ausencia: eran demasiado caras. Ahora, sin embargo, los chinos pueden encargar incluso vía Internet cómodamente langosta de Boston o de Maine. La demanda aumenta sin cesar. El año pasado, China importó langostas por 108 millones de dólares. En 2010, habían sido 7,4 millones.
La demanda china aumenta entre un 30 y un 50 por ciento por año y asegura numerosos puestos de trabajo entre los pescadores norteamericanos. Lo que no asegura es una significativa reducción del déficit comercial de Estados Unidos con China, que en 2016 ascendió a 350.000 millones de dólares. Y eso, a pesar de que las áreas del transporte, la logística y el comercio online de productos pesqueros están cada vez más interconectados entre ambos países.
Alibaba y las ganancias
La empresa china Alibaba es un buen ejemplo. Alibaba y otras empresas chinas crean puestos de trabajo en Estados Unidos y simultáneamente obtienen buenas ganancias con la exportación de langosta a China.
La demanda de langosta estadounidense aumenta también en otros países de Asia. Las importaciones de langosta de Corea del Sur pasaron de cinco millones de dólares en 2010 a unos 28 millones en 2016. Y las de Vietnam, de 143.000 dólares a 31 millones.
Diplomáticos chinos y estadounidenses estiman que el encuentro de Xi Jingping, el jefe de partido y Estado chino, y Donald Trump la semana pasada, constituye una buena base para avanzar en las relaciones comerciales bilaterales. Los medios estatales chinos mostraron una y otra vez imágenes de un Xi sonriente. Los dardos que Trump arrojó anteriormente contra China ni siquiera fueron mencionados. Para los medios chinos, todo fue armonía.
Corea del Norte, siempre un tema
Xi y Trump se reunirán nuevamente dentro de cien días. En Mar-a-Lago, Xi invitó a Trump a visitar China. Se verán en la fecha aproximada de sus próximos respectivos cumpleaños: Xi cumple años el 14 de junio y Trump, el 15. Ambos podrían hacerse un gran regalo este año: enterrar el hacha de guerra comercial.
La paciencia no es una de las más destacadas fortalezas de Trump. Este martes (12.04.2017) tuiteó que China conservaría un acceso privilegiado al mercado norteamericano solo si resuelve el problema con Corea del Norte. Simultáneamente anunció que si China no lo resuelve, Estados Unidos se encargará de ello. La pelota está, por lo tanto, nuevamente del lado chino. Pero, por lo menos, los chinos podrán reflexionar sobre el tema comiendo langosta.