La noche del jueves se emitió un nuevo capítulo de “De tú a tú”, donde Martín Cárcamo llega hasta la residencia de su amigo Rafael Araneda, en un condominio donde -según el animador- viven unas 3 mil personas, para hablar de su vida y de su familia radicada hace un año en Weston, Florida, Estados Unidos.
Los animadores partieron la conversación hablando de la hija mayor de Araneda, Martina, la única que no vive con ellos y que decidió quedarse en Chile estudiando. "Ella está en una edad en que, pese a que nosotros insistimos en contenerla, ella también quiere volar con alas propias. Cuesta entenderlo, yo todavía no la entiendo, o sea la entiendo, pero no me gusta tanto", dijo.
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Tras recorrer la casa y hablar de los hitos en su vida, se vivió un emotivo momento cuando Martín le mostró a Rafa una foto en donde aparecía junto a sus padres. Fue ahí que el conductor comenzó a hablar de la relación que tenía con su padre, quien falleció cuando el comunicador tenía 31 años.
"Qué viejo más gozador, más entretenido”, dijo y luego ahondó en cómo fue la muerte de su progenitor. "Él llegó del supermercado, le dice a la mamá ‘me duele la espalda’, ella sintió unos gritos y chao".
Araneda comentó que estaba en la radio cuando Marcela la llamó por teléfono para decirle que algo le había pasado a su padre.
"Agarré el auto, parto para la casa y estaban reanimándolo. Mi mamá les decía a ellos 'se fue hace rato, yo sé que se murió, tranquilos'. El papá ya estaba en otra, estaba muerto", precisó.
Tras esto, dijo que se fue al living de la casa y puso "My way" de Frank Sinatra a todo volumen. Fue ahí cuando se emocionó al recordar aquel momento. “Lo echo harto de menos, porque he tenido el privilegio de poder armar una familia a toda raja y que no conozca a las niñitas, a Vicente, a Benjamín me duele mucho, toda esa parte me duele mucho“, sostuvo.
Y agregó: "Que no pueda ver lo bien que le ha ido a sus hijos…porque a él nunca le fue bien en términos de tener una tranquilidad económica, o una tranquilidad en el futuro, siempre andaba con lo justo. Yo lo lloro casi todos los días con un vinito".
Con lágrimas en los ojos, afirmó que "era mi mejor amigo". Luego de esta frase, Cárcamo se mostró muy afectado y le dijo: "Me cagaste".
Finalmetnte, reconoció que antes no tomaba vino pero que desde que murió su papá comenzó a hacerlo. "Lo hago por todos los vinos que me perdí con él".
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