Tomas Robert Lindhal es el hombre del momento en el mundo científico, junto a sus compañeros Paul Modrich y Aziz Sancar, por haber sido galardonado este miércoles con el Nobel de Química por sus estudios en células humanas y su capacidad de reproducirse y autorepararse.
Como parte de su trabajo de ADN, Lindhal especificó cuál es el rol del cigarro como motor del cáncer.
"El humo del cigarrillo contiene pequeñas sustancias químicas reactivas, que se unen al ADN y le impiden ser replicado correctamente, por lo que son mutágenos", señaló el profesor Lindahl a BBC, y añadió: "Una vez que hay daños en el ADN, esto puede causar enfermedades como el cáncer".
Según explica Lindahl, para hacer frente a esos defectos, una buena parte de sistemas moleculares monitorean constantemente nuestra información genética. Los tres nobeles mapearon la forma en que trabajan estos mecanismos de monitoreo. Finalmente demostraron que la información genética decae a un ritmo muy rápido.
El científico detalló que el fumar, además de dañar la información genética original de las células que afecta, “debilita su capacidad de reparar ese ADN”.