Desde que comenzaron los incendios forestales de Australia en septiembre, que las celebridades no han quedado desaparecibidas ante la situación. Son varios los rostros que se han unido a la causa y han hecho donaciones para los cuerpos de bomberos del país oceánico.
Nicole Kidman, publicó en su cuenta de Instagram, con más de seis millones de seguidores, la lista con direcciones a las cuales acercarse para realizar donaciones o colaboraciones al cuerpo de bomberos junto con un mensaje de apoyo y oraciones de su familia para los afectados en Australia. Al mismo tiempo, anunció su aporte de $500,000 dólares (385 mil millones de pesos chilenos aproximadamente) junto a su esposo, Keith Urban.
La cantante estadounidense, Pink, también se unió a la causa y a través de Instagram, publicó la misma lista para que sus seguidores presten ayuda, asimismo indicó que "estoy totalmente devastada viendo lo que pasa en este momento en Australia con los incendios. Estaré haciendo una donación de 500 mil dólares a los servicios de bomberos locales que batallan tan duramente en cada frente. Mi corazón está con nuestros amigos y familiares de Oceanía", añadió.
Por otra parte, la cantante y ex estrella de Disney, Selena Gómez, utilizó su cuenta de Twitter para referirse a la situación y solicitar que todos los que puedan hagan una donación, como lo hizo ella.
“Estoy absolutamente devastada por los incendios en Australia. Rezo por todos los afectados.'' tuiteó.
El actor de Marvel, Christopher ''Chris'' Hemsworth, publicó un video en su Instagram anunciando que junto a su familia harían un donativo de $1 millón de dólares (772 mil millones de pesos chilenos aproximadamente), añadiendo que ''todo peso cuenta'' e invitando a que todos reúnan lo que más puedan.
Ellen DeGeneres, la presentadora y animadora de televisión, se sumó a la causa de apoyo enviando un mensaje en Twitter y anunciando que ya donó a tres organizaciones, y que está ''esperando que tú también lo hagas''.
Actualmente en Australia, el Estado de Nueva Gales del Sur, el más afectado por el fuego con 20 de los 25 muertos registrados hasta el momento, unos 2.600 bomberos trabajan para extinguir o impedir el avance de unos 130 focos que siguen activos en la zona.
La organización cifró en 1.588 el número de casas destruidas en Nueva Gales del Sur desde que comenzó la temporada de incendios en septiembre, 672 de las cuales en lo que va de 2020, pero alertó que la cifra aumentará a medida que se acceda a todas las zonas afectadas.