"La Luna se está encogiendo", así comienza el comunicado de la NASA sobre el estudio realizado a la superficie lunar, agregando que el satélite natural terrestre se ha encogido 50 metros en los últimos cientos millones de años, tal como "una uva se arruga cuando se reduce a pasa, la Luna se arruga al encogerse".
Según los expertos esto ocurre porque la Luna no cuenta con placas tectónicas como la Tierra que están en constante movimiento, por lo que al haber un sismo, se erosiona, agrietándose, formando "fallas de empuje".
"Nuestro análisis proporciona la primera evidencia de que estas fallas aún están activas y probablemente producen sismos lunares a medida que la Luna sigue enfriándose y disminuyendo gradualmente", señaló Thomas Watters, científico del Centro para Estudios Planetarios y de la Tierra en el Centro Smithsoniano del Aire y del Espacio.
Watters es el autor principal de un estudio publicado en la revista Nature Geoscience, donde analizó los datos de los sismógrafos instalados en la superficie lunar por las misiones Apolo 11, 12, 14, 15 y 16, los que registraron 28 sismos lunares poco profundos entre 1969 y 1977, los que tuvieron magnitudes entre 2 y 5 Richter.