Las ilusiones ópticas han fascinado a la humanidad durante siglos. Sobre todo, si aparecen en la naturaleza, como en el caso de la roca Kummakivi, en Finlandia, cuya posición "imposible" parece desafiar las leyes de la física, o los casos de pareidolia en Marte, que han hecho "creer" a muchos entusiastas que en el planeta rojo se han avistado gatos, patos, osos e incluso puertas alienígenas.
Otro caso, quizá más llamativo, en el que la naturaleza parece haber creado intencionadamente una arquitectura única, es el del lago Sørvágsvatn, en las Islas Feroe –un grupo de unas 750 islas al norte-noroeste del Reino Unido, y aproximadamente a medio camino entre Noruega e Islandia formando un archipiélago autónomo con 17 islas habitadas–, que aparentemente flota sobre el mar que lo rodea por debajo.
Solo una ligera pendiente
Visto desde lejos, parece que el lago está inclinado hacia el océano, pero solo se desborda en una pequeña cascada. Esta ilusión óptica también crea la impresión de que el embalse está situado a cientos de metros sobre el nivel del mar. Sin embargo, en realidad, la diferencia de altitud entre el lago y el océano es solo de unos 30 metros.
Así, visto desde arriba, el lago parece estar al mismo nivel que la cuesta. Sin embargo, si se observa la foto de abajo, se puede ver que el lago está situado en una suave pendiente. La foto de abajo ofrece una vista directa de la cascada de Bøsdalafossur, que es la desembocadura del lago en el Atlántico.
Déjà vu: ¿fenómeno sobrenatural, universo paralelo o hecho normal?
Según varios medios de comunicación, su apariencia aparentemente imposible se debe a los pronunciados y significativos cambios de altitud de las colinas circundantes que dominan el lago, situado en una profunda depresión, y cuyo imponente promontorio se eleva 252 y 376 metros a izquierda y derecha.
La isla de Vágar
El lago Sørvágsvatn, también conocido como Leitisvatn o incluso "el lago sobre el océano", es el mayor de las Islas Feroe y se encuentra en la isla de Vágar. Aunque pertenecieron a Noruega durante cientos de años, ahora forman parte del Reino de Dinamarca.
Con 59 metros, Sørvágsvatn es también el lago más profundo de las Islas Feroe. Por ello, el lago es también un lugar popular para los pescadores, según informa Interesting Engineering.
La isla de Vágar desempeñó un papel crucial en la Segunda Guerra Mundial debido a su posición estratégica. Durante la ocupación británica de las Islas Feroe, se construyó un aeródromo en la parte occidental de la isla para monitorear los movimientos de los buques de guerra alemanes. Este aeródromo permitió a los británicos tener un mayor control de la región y fue utilizado para misiones de reconocimiento y patrullaje.