¿Te ha pasado que cuando vas a dormir, inevitablemente sacas uno o ambos pies de la sábana? Esta incomprendida acción tiene una explicación y tiene relación con la temperatura corporal.
Según explicó a Verne el neurocientífico Matthew Walker, autor del libro "Por qué dormimos", el cuerpo necesita perder cerca de un grado centígrado para poder dormir, afirmando que ese es el motivo por el cual es más fácil dormirse en una habitación demasiado fría que en una demasiado cálida.
Además, el neurocientífico explicó que el cuerpo no solo se enfría en función del ambiente, sino también usa la piel y -por ende- varias partes del cuerpo para bajar la temperatura, entre ellos, las manos, la cabeza y los pies.
Por ende, cada vez que nos vamos a dormir, las manos, la cabeza y los pies se calientan para que el calor se disipe y la temperatura corporal disminuya, pero los pies o las manos, al estar tapados con una frazada no pueden liberar este calor, provocando que muchas personas, invetiblemente, saquen los pies o las manos del cobertor.
Esta nota fue publicada originalmente el jueves 11 octubre de 2018 y se actualizó para su publicación el 04 de enero de 2020