Ni Taylor Swift ni Kim Kardashian quisieron dejar de ser protagonistas mientras el mundo sufre las consecuencias del avance del coronavirus, reavivando una polémica entre la familia de la empresaria y la estrella de la música pop que data de hace cuatro años.
En ese entonces, el esposo de la estrella televisiva, el rapero Kanye West, publicó una canción llamada "Famous" en la que tilda de "perra" a su colega, situación que sumó otro capítulo a la disputa entre ambos.
Desde esa temporada en adelante, la discusión se enfocó en si Swift dio o no permiso para que el hombre de "Black Skinhead" la incluyera en su repertorio. Aunque ella también apuntó a que nunca estuvo de acuerdo en el mensaje "misógino" que traía el tema.
Como sea, este sábado se desveló la conversación completa entre West y la mujer de "Wildest dreams", dejando a esta última como la persona que estaba en lo correcto.
Aún así, este lunes por la noche, Kim Kardashian atacó largamente a Taylor Swift tratándola de "egoísta", "insensible" y "mentirosa" por volver al tema justo en este tiempo en el que el foco de la ciudadanía es defenderse ante el COVID-19.
"Taylor Swift ha optado por reactivar un antiguo intercambio, que en este momento se siente muy egoísta dado el sufrimiento que enfrentan millones de víctimas reales en la actualidad. No sentí la necesidad de comentarlo hace unos días, y en realidad estoy realmente avergonzada y mortificada de hacerlo en este momento, pero debido a que ella continúa hablando sobre eso, siento que no tengo más remedio que responde porque ella realmente está mintiendo", fueron sus primeros mensajes en Twitter.
Y continuó: "Para ser claros, el único problema que tuve con respecto a la situación fue que Taylor mintió a través de su publicista que declaró que 'Kanye nunca llamó para pedir permiso...'. Ellos hablaron claramente, así que les dejé ver eso. Nadie negó que la palabra 'perra' fuera usada sin su permiso".
"En el momento en que hablaron, la canción aún no se había escrito completamente, pero como todos pueden ver en el video, ella manipuló la verdad de su verdadera conversación en su declaración cuando su equipo dijo que ella 'lo rechazó y le advirtió sobre el lanzamiento de una canción con un mensaje misógino tan fuerte'. La mentira nunca fue sobre la palabra perra, siempre fue si había una llamada o no y el tono de la conversación".
Y cerró: "Nunca edité las imágenes (otra mentira): solo publiqué algunos clips en Snapchat para dejar mi punto de vista y el video completo que se filtró recientemente no cambia la narrativa. Para agregar, Kanye como artista tiene todo el derecho de documentar su viaje y proceso musical, tal como lo hizo recientemente a través de su documental. Kanye ha documentado la fabricación de todos sus álbumes para su archivo personal, sin embargo, nunca ha lanzado ninguno para el consumo público y la llamada entre los dos habría permanecido en privado o se habría ido a la basura si ella no hubiera mentido y forzado a mí para defenderlo. Esta será la última vez que hable sobre esto porque, sinceramente, a nadie le importa. Lamento aburrirlos a todos con esto. Sé que todos ustedes están lidiando con asuntos más serios e importantes".
Ahora, la palabra la tiene Taylor Swift.