Cada cosa que haga Kim Kardashian es seguida por la prensa a nivel mundial.
Por lo mismo y en el marco de su asistencia al desfile de Demna Gvasalia para Balenciaga, realizado el 6 de marzo, los ojos estuvieron puestos en ellas, sobre todo luego de que se conociera la noticia que ahora está "soltera".
La empresaria fue una de las invitadas estelares al evento realizado en el centro de exposiciones Le Bourget como parte de Semana de la Moda de París.
Fiel a su estilo, la estrella de "Keeping up with the Kardashians" llamó la atención con su extravagante atuendo, que constaba de un top deportivo y leggings cubiertos con cinta de embalaje de la marca Balenciaga, a juego con su bolso Hourglass de la misma marca.
Fue a través de sus 'stories' de Instagram que la socialité, de 41 años, compartió el proceso que requirió de tres asistentes que la envolvieron desde la punta de los pies hasta el cuello.
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Pero no todo fue glamour y comodidad en el desfile, ya que Kim tuvo que sortear varios inconvenientes a la hora de moverse y sentarse.
La crítica de moda del New York Times, Vanessa Friedman, contó que estuvo sentada muy cerca de la empresaria en el evento y notó que su traje hacia un ruido muy molesto -el típico de roce de cinta adhesiva- cada vez que se movía, consigna Vogue.
"Tengo miedo de que se rompa cuando me siente. ¿Debería simplemente dejar que se rompa?", admitió Kardashian, según relató Friedman.
