Kelly Osbourne entregó un argumento poderoso sobre la tesis de que el 2020 siempre puede ser peor, aunque ya estemos en noviembre.
La artista musical y figura televisiva debutó en sus redes sociales con un vistoso parche en el ojo que no tenía que ver ni con un video musical ni con ninguna moda incomprensible. Todo lo contrario, la hija de Ozzy y Sharon sufrió un doloroso e insólito accidente que pudo costarle un globo ocular.
"Cuando tu maquillador te diga: 'No te muevas', no te muevas. No te muevas en absoluto", dijo la mujer de 36 años a Entertainment Tonight. Y añadió: "Actualmente estoy en camino al oculista porque me rasqué mi maldito globo ocular con una toallita de rímel".
Apenas ocurrió el accidente, su maquillador se deshizo en disculpas. Pero Kelly Osbourne asumió toda la responsabilidad.
"¡Fue mi culpa! ¡Realmente fue mi culpa! Me mudé directamente a eso. Realmente espero conseguir un parche en el ojo porque eso sería un jodido estilo", dijo.
Viéndole el lado bueno al asunto, la ex estrella de reality show compartió de inmediato algunas fotografías y videos con su nuevo accesorio, encantada por cómo luce.
"Lo único bueno de esto es que parece que podría envenenarte y patearte el trasero con solo mirarte", aseguró la artista, aunque siguió quejándose del dolor.
"Esto es una de las mierdas del 2020. Todo lo que puedo decir es 2020", definió.
Antes del parche, Kelly Osbourne mostró en sus redes sociales su increíble cambio físico tras bajar casi 40 kilos.
"Trabajar duro, aceptar quién eres en realidad. En el fondo de toda esa inseguridad/gordura puede transformarse algo hermoso", expresó.
