Tiene sólo 10 semanas y ya tuvo una experiencia extrema que podría haber tenido consecuencias para toda su vida. Según contó su propia madre, hace algunas semanas un bebé inglés casi perdió un dedo del pie por culpa de un accidente casero.
El medio estadounidense People relata la historia de Alex Upton, que a sus 26 años vivió una "experiencia horrible" según ella misma relata. Cuenta la joven madre que estaba durmiendo con el neonato llamado Ezra cuando de pronto la despertaron sus llantos.
Lo primero que ella pensó fue que el bebe quería beber leche, pero este rechazaba el alimento. Fue ahí cuando al examinarlo descubrió que uno de los dedos de sus pies estaba enredado con un cabello de ella. La imagen era preocupante, ya que el dedo lucía hinchado y falto de circulación.
"Debieron de ser entre 12 y 14 horas, porque sólo me di cuenta en la mañana (...) jalé el cabello y me di cuenta de lo ajustado que estaba. Me sentí terrible", narró.
Luego de quince minutos sin resultados tuvo que utilizar unas pinzas y eventualmente llevó a Ezra al doctor para que le suministraran antibióticos.
El involuntario torniquete pudo significar que el niño terminara con su dedo amputado debido a la falta de circulación sanquínea. De acuerdo al medio estadounidense Today, se pueden producir por cabellos sueltos entre la ropa del bebé.