Un gato ha sido protagonista de una de las historias más llamativas del último tiempo en Sri Lanka.
Se trata del gato “narcotraficante”, quien había sido capturado en la cárcel de alta seguridad de la ciudad de Welikada tras ser sorprendido portando dos gramos de heroína, dos tarjetas SIM para celulares y una tarjeta de memoria.
El animal habría sido entrenado para contrabandear estos elementos y entregárselos a reclusos, lo que motivó su “detención”. ¿Cómo lo hizo? La droga y los objetos estaban en una bolsa que tenía atada a su cuello.
El hecho ocurrió el pasado 1 de agosto y mientras se realizaban las diligencias el animal seguía recluido dentro del penal.
Pero… se fugó.
Nadie sabe cómo, pero el felino logró escabullirse entre guardias de seguridad y personal de seguridad del recinto penitenciario hasta salir del recinto sin dejar rastro alguno.
Según consigna Yahoo News, las autoridades no se refirieron al incidente y las investigaciones siguen su curso.