La actriz Meg Ryan fue un icono en los 90 luego de protagonizar varios éxitos como “Cuando Harry conoció a Sally”, “Tienes un email”, “un Ángel enamorado” y “Sintonía de amor”, entre otros. Sus ojos azules y sus rizos dorados conquistaron a una generación.
Durante su carrera estuvo involucrada en ciertas polémicas como su divorcio con el actor Dennis Quaid por una infidelidad con Russell Crowe.
Sin embargo, la intérprete esta vez estuvo bajo tras presentarse en el Alice Tully Hall del Lincon Center apoyando a su amigo el actor Michael J. Fox, en la presentación de "Still", el documental que narra la lucha de este contra el Párkinson, enfermedad que padece desde tres décadas.
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Desde hace años, Meg ha negado haberse sometido a cirugías estéticas, pero las imágenes muestran lo opuesto ya que sus pómulos están hinchados y su rostro no tiene arrugas.
En tanto, los cibernautas rápidamente reaccionaron a las imágenes: “¿Qué se ha hecho en la cara?”, “¿Es realmente Meg Ryan?” o “¡Deja los rellenos!”, fueron algunos de ellos.