Un hombre llamado Ted Pelkey puso un pequeño poblado, de 2000 personas en Northwestern Vermont, en la palestra pública a nivel mundial, luego de que el sujeto construyera la escultura de un dedo del medio en el patio de su casa, sobre un poste de casi cinco metros de altura.
La acción fue efectuada a modo de protesta, según señala el medio Boston.com, tras 10 años esperando el permiso de su municipio para construir un garage en su propiedad, el que finalmente fue negado.
"No estoy tratando de causar odio y animosidad a las personas que viven en esa ciudad, porque hay gente muy buena en esa ciudad", dice el nativo de Westford, de 54 años.
"Estaba sentado en un bar y le dije a mi esposa: 'Oye, quiero tener una estatua hecha de un dedo del medio, y voy a ponerla en el césped", dijo a Boston.com en una entrevista.
Los funcionarios dicen que las solicitudes de Pelkey no han cumplido con los estándares de la ciudad. Pelkey respondió poniendo focos en la escultura para que esta se viera de día y de noche.