En 1965, los astronautas participantes de la misión Gemini 4, descubrieron una estructura de 50 kilómetros de diámetro, que solo puede ser vista en su plenitud desde el espacio. Este "ojo" se ubica en el desierto del Sahara, cerca de la ciudad de Oudane, en Mauritania, Africa.
En un comienzo se creía que la estructura había sido formado por el impacto un asteroide, los que explicaría su forma circular, pero estudios posteriores señalan que era más probable que se trate de un domo anticlinal, que son pliegues de la corteza terrestre que muestra los estratos más antiguos del planeta.
Esta vez, el fenómeno fue fotografiado por el comandante de la Estación Espacial Internacional, Luca Parmitano, orbitando a 400 kilómetros sobre el nivel del mar.
La fotografía fue publicada por la Agencia Espacial Europea, donde se puede apreciar claramente los anillos concéntricos que forman el “Ojo del Sahara”.