[FOTO] La aterradora infección que contrajo un hombre tras asistir a su gato enfermo
No es muy común que nuestras mascotas contraigan una enfermedad ni mucho menos que los dueños se contagien del mismo virus. Aun así, esto fue exactamente lo que le ocurrió a un hombre de 68 años en Estados Unidos tras asistir a su gato, que sospechaba que padecía leucemia felina.
Según lo estipulado en el New England Journal of Medicine, el dueño contrajo tularemia, enfermedad provocada por la bacteria Francisella tularensis, poco vista, por lo demás, en humanos.
"He visto tal vez tres casos en toda mi vida", dice Andrej Spec, profesor asistente de medicina en la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington, a la revista People. Según relata, el paciente visitó la atención médica luego experimentar fiebre de una semana sumada a una “hinchazón progresiva y dolorosa en el sector derecho del cuello”.
Para el profesor, él se contagió de la bacteria en el momento en que le proporcionó medicinas a su mascota, que ya poseía el malestar. "Si alguna vez has tratado de dar un medicamento a un gato, sabes que silban, escupir, muerden y se rascan, y eso es lo que sucedió aquí", dice Spec.
La tularemia es una enfermedad rara en humanos. Sin embargo, puede ser contraída fácilmente mediante el aire y el agua, ya sea por manipular animales enfermos o muertos, o bien por inhalar las partículas dañinas.
“Cualquiera que sea mordido por un gato debe consultar a un médico independientemente de los síntomas, porque deben ser tratados con antibióticos profilácticos para evitar cualquier posible infección”, añade el doctor.
La Francisella tularensis, explica, puede ser potencialmente mortal si no se trata. Afortunadamente, la mayoría de los casos se tratan sin mayor problema con el uso de antibióticos.
“Si te acaba de rascar un gato y no desarrollas síntomas, estás bien, pero si comienzas a desarrollar fiebre o estos nódulos, debes ir al doctor de inmediato", advierte Spec.
Esta es una imagen publicada por la revista médica que muestra los graves efectos de la infección.
Imágenes pueden herir sensibilidades.