La pandemia del coronavirus ha modificado la forma en que vivimos. El trabajo desde casa se ha vuelto fundamental para miles de chilenos, quienes ven la necesidad de estar mucho mejor conectados a internet.
El teletrabajo no es el único bajo esta premisa, también la de estudiantes que requieren de una conexión estable para sus clases online. Lo mismo para cientos de pacientes que ven en la telemedicina una forma de mantener sus consultas en medio de la emergencia sanitaria.
Las autoridades han reconocido que esto ha estresado a las redes domiciliarias, viendo un aumento en el tráfico promedio de una casa.
“El consumo de datos fijo en promedio por hogar fue de 259 GB mensuales en diciembre de 2019, lo que en pandemia se ha disparado. En el mes de abril de este año registramos un consumo promedio mensual de 335 GB y estimamos que seguirá creciendo”, dice a T13.cl la subsecretaria de Telecomunicaciones, Pamela Gidi.
Este aumento en la demanda ha evidenciado falencias en las conexiones, que se observan en un salto en los reclamos al Sernac en el mercado de las telecomunicaciones. Si entre marzo y julio de 2019 las quejas registraban 27.260 casos, para mismo periodo de este año se contaron cerca de 61.200 denuncias (un aumento de 124%).
Hace unos días el director nacional del Sernac, Lucas del Villar, señaló que si bien “entendemos que, al principio de la pandemia, las compañías hayan tenido dificultades para prestar adecuadamente el servicio por el aumento de la demanda, ya han pasado cuatro meses, donde lo esperable es que las empresas ajusten sus procesos y respondan adecuadamente a los consumidores”.
Por lo anterior, se determinó presentar una demanda colectiva en contra de VTR, debido a que ha recibido la mayor cantidad de denuncias. La firma es el actor con mayor participación de internet fijo en Chile, con el 38,4% de los abonados, seguido de Movistar (27,6%) y Claro (13,3%) según cifras de Subsecretaría de Telecomunicaciones a diciembre de 2019.
Fibra óptica: la promesa
Bajo este escenario, los usuarios han visto en la fibra óptica una solución. Se trata de una tecnología de conexión a internet que promete mayor estabilidad y con mejores velocidades. Un salto a la actual tecnología basada en cables de cobre.
“La fibra óptica si bien no es algo nuevo —tiene su par de décadas, quizás algo más—, se viene usando en el hogar en Chile desde hace poco, una década. Tiene la particularidad que transmite luz. Por eso se llama fibra óptica. Esta fibra no está compuesta de nada metálico, es básicamente una especie de vidrio flexible pero hasta cierto punto, si lo curvas mucho se quiebra igual. Si lo azotas contra el piso, se te va a romper igual. Es súper delicado de tratar y normalmente se ocupa en lugares donde esté todo bien canalizado”, comenta a T13.cl el académico de la Escuela de Informática y Telecomunicaciones UDP, Jonathan Frez.
Según el experto, su instalación es algo más trabajada que la de cobre debido a su naturaleza. Sin embargo, su gran diferenciador está en la experiencia de usuario. “Soporta velocidades más altas. Pero eso depende de lo que uno haya contratado. Porque por ejemplo uno puede contratar las mismas velocidades de 300/400 megas, que encuentras en distintas tecnologías, no sólo fibra. Pero sí, el gran cambio es en la tasa de pérdida”, afirma.
“Toda la información que transmitimos está sujeta a pérdida. Siempre hay un porcentaje de información que se pierde y que depende de lo que estemos haciendo si es necesario retransmitirla o no. Por ejemplo, si estamos viendo videos en YouTube o Netflix, lo que se pierde se vuelve a retransmitir. Por eso es que se queda pegado y después empieza a avanzar. Y después se queda pegado de nuevo y después vuelve a avanzar. Porque esa información que se perdió hay que esperar a que llegue de nuevo para que se pueda completar”, explica.
Otro ejemplo son las videollamadas, que de vez en vez hacen oír a los participantes con voces metalizadas. En esos casos se pierde los datos de la voz “y el software trató de completar esas partes pero sin saber lo que se quería decir. Así que lo completó con algún sonido que se oye metalizado. Y eso es porque en una conversación entre personas no puedes esperar a que llegue la información de nuevo, porque si no, se pierde el hilo de la conversación. Hay tecnologías que priorizan por ejemplo, en la videoconferencia, que el video se quede pegado, o el audio se quede pegado, a cambio de que tú puedas conversar de una manera más fluida”.
La promesa de la fibra óptica, agrega Frez, es que esta tasa de pérdida es menor. “En la fibra óptica versus tecnología basada en un par de cobre, metálico u otro tipo, es un cambio radical porque la fibra pierde muy poco”, asegura.
- ¿Podríamos decir que la fibra es al cobre lo que es el 5G al internet móvil? Si quisiéramos aterrizar esto.
- Claro, aterrizándolo sí, es como otra generación de tecnología que soporta velocidades mucho más altas. Otra cosa es que no las comercializan. Por ejemplo uno podría encontrar un plan de 1 Giga para un hogar, pero no hay ningún limitante para que te ofrezcan uno de 200 Gigas, salvo por el precio y que de seguro uno no lo va a contratar. Pero en términos de tecnología te podría soportar ese tipo de velocidades. Los computadores en el hogar no soportan esas velocidades. Entonces tampoco tiene mucho sentido, pero es tecnología que se hace para empresas donde hay múltiples computadores que necesitan acceder y ahí sí hace sentido vender esas velocidades. Pero para el hogar, con la capacidad de transmisión de la fibra tiene demás.
En Chile, este tipo de conexión ha tenido un crecimiento constante en la última década. Según estadísticas de la Subtel, las conexiones a fibra significaban el 0,4% del total de tecnologías fijas disponibles en 2011, mientras que a marzo de 2020 representan el 30% del total de conexiones.
“Los usuarios han migrado desde conexiones antiguas y de menor capacidad, como el ADSL, a otras que pueden entregar el servicio que se adecue a sus necesidades. Es así como vemos un crecimiento importante de las conexiones de fibra óptica”, estima la subsecretaria Gidi.
Desde las empresas de telecomunicaciones reconocen un aumento en la demanda de este tipo de tecnología, potenciado en gran medida por la pandemia y sus efectos en el estilo de vida.
Fernando Saiz, director de Regulación y Asuntos Públicos de Movistar Chile, detalla que “la fibra óptica garantiza capacidades dedicadas a cada usuario, y entrega altas velocidades de hasta 900 Mbps de bajada y hasta 450 Mbps de subida. Esta buena performance es lo que más ha sido valorado por los usuarios, lo que nos ha llevado a observar un aumento de más de 50% en las contrataciones de Movistar Fibra, en comparación con 2019”.
En Entel también ven un efecto similar. “Ya en los últimos meses pre COVID habíamos tenido un crecimiento importante que a raíz de la emergencia sanitaria se incrementó, por sobre lo esperado, en un año normal. Los últimos meses el incremento en ventas es de 65% versus los meses anteriores a la pandemia”, cuenta Daniel Ríos, gerente mercado hogar de Entel.
Un escenario distinto es el que ofrece VTR, desde donde se explica que ellos utilizan una tecnología híbrida de fibra óptica con cable coaxial, que “hasta hoy nos ha permitido conectar con nuestros servicios de televisión, banda ancha y telefonía a más de 1,5 millones de hogares en todo Chile”.
Este híbrido de fibra coaxial (HFC) lo que hace es unir los nodos de fibra con los hogares, es decir que la conexión final para las casas es con metal. Si bien en VTR reconocen que para su sector el siguiente paso es la utilización de tecnologías de fibra óptica, apuntan más a mejorar la actual HFC con la que trabajan.
“Las grandes cable operadoras a nivel mundial, como Comcast y Charter están invirtiendo en evoluciones de la propia red HFC, como lo es la tecnología Docsis 3.1, que permite velocidades de sobre 2 Gbps. Si bien en VTR también estamos desarrollando estas tecnologías, estamos convencidos que el paso más importante para tener una mejor experiencia de internet, no está en cambiar la tecnología de red con la que entregamos acceso a este servicio, sino en mejorar la experiencia de navegación que tienen los usuarios dentro de sus casas”, agregan.
¿Cómo obtener la fibra óptica?
Las empresas que ofrecen esta tecnología de conexión directa de fibra al hogar cuentan en sus sitios web con sistemas que permiten verificar las factibilidades técnicas de los territorios. En ese sentido, desde Entel sugieren organizarse entre vecinos para pedir la llegada si hay ya fibra óptica desplegada en zonas cercanas.
“Ayuda sobre todo para quienes viven en edificios y en condominios dentro de comunas con cobertura. Sin embargo, hay que considerar los despliegues, ya que si hay fibra a algunas cuadras de su domicilio es más simple realizar el despliegue para dar factibilidad, pero cuando son comunas en las que aún no se ha desarrollado el despliegue, la solución es ver otra conexión”, dice Ríos.
Por su lado, Movistar Chile hace hincapié en la necesidad de un gran acuerdo público-privado, que permita “un subsidio a la demanda para zonas donde hay red pero falta capacidad de pago, o bien, reorientar los subsidios del Fondo Nacional de las Telecomunicaciones para desplegar la última milla de fibra”.
“De esta manera, en Chile podremos avanzar en conectar al menos al 85% de las personas a la fibra óptica. Asimismo, todo plan de conectividad nacional puede verse fortalecido a través de una tendencia que vemos cada vez más en distintos países, como es la compartición voluntaria de red, lo que permitirá acelerar el desarrollo de las tecnologías, optimizando las inversiones”, señala Saiz.
En la Subtel informan que la actual administración duplicará los kilómetros de fibra óptica disponible en el país. “En ese sentido impulsamos el proyecto Fibra Óptica Nacional (FON), que cuenta con un histórico subsidio de $ 86 mil millones, y que desplegará troncales de fibra óptica a través de 186 comunas del país, acercando redes de alta velocidad a los distintos lugares del país”, asevera la subsecretaria Pamela Gidi, que recuerda también el proyecto Fibra Óptica Austral e iniciativas de despliegue de proyectos de última milla.
No tengo fibra óptica en mi sector: ¿qué hago?
A la espera del despliegue de la fibra óptica, Jonathan Frez comenta que es posible conseguir tasas de pérdida similares a la fibra con el cable de cobre, pero con instalaciones más sofisticadas y, a su vez, costosas.
Por ello recomienda lo siguiente a los usuarios:
- Conectarse por cable de red en vez de WiFi
- No doblar el cable de red más de 90 grados, ya que se pueden romper los cables internos.
- Estar cerca del router. “Mientras más lejos estés del router, mayor es la tasa de pérdida que tienes y más metalizado se escucha tu audio, hasta que se corta la comunicación”.
- Si no se le ha hecho una mantención a la instalación en los últimos tres años, pedirla. La humedad es una desventaja contra una buena conexión a internet.
- Posicionar el router WiFi en un pasillo si hay muchas piezas.
- Instalar antena al router WiFi (algunos no lo permiten) o al computador. “Si uno se lo compra al computador, uno tiene mejor señal, pero si le instalas antena a tu router, todos los demás equipos de la casa van a tener mejor señal”.
- Evaluar la compra de PowerLinks. “Son algo caros sí. Son aparatos que se enchufan a la pared, lo conectas al router, vas a la pieza donde quieres señal y enchufas el otro. La señal se va por el tendido de la casa, y llega al otro lado. Permite dar cobertura a ciertas zonas que no tenías”.