Los hijos de Ragnar quieren tomar el testimonio de su padre y sus diferencias se acrecentarán con el correr de los episodios. La quinta temporada de "Vikingos" estará marcada por la sangre a cambio del poder, consigna que por momentos se volverá despiadada como justificación para conseguir los objetivos de los distintos personajes.
Este viernes 1 de diciembre se estrena el nuevo ciclo de la serie creada por Michael Hirst en la señal Premium Series de Fox con un episodio doble. Además, la entrega estará constituida por 20 capítulos divididos en dos etapas —la segunda con fecha para 2018—, con la promesa de alianzas, traiciones y muerte en cada una de las entregas.
Allí, el principal combatiente será Ivar, que ya sin su padre habrá encontrado todavía más fortaleza psicológica para enfrentar a sus enemigos y para distanciarse, a la vez, de Hvitserk y sobre todo de Ubbe, al que esta guerra sin cuartel le pasará la cuenta.
Porque el Deshuesado no solo se conformará con asesinar, sino también con torturar al que se le cruce en el camino (de hecho, en el debut de la nueva temporada los fanáticos podrán ver una muerte similar a una ocurrida en "Game of thrones" que quedará en el recuerdo).
En otras latitudes, la reina de Kattegat, Lagertha, sufrirá una sensible pérdida en su afán por demostrar supremacía; mientras que Floki navegará por los mares en una ruta guiada por los dioses.
El actor Jonathan Rhys-Meyers, en tanto, se convertirá en uno de los personajes principales como el obispo de Heahmund, religioso de pasado tormentoso que será el eje de la resistencia británica.
"Los antecesores de los Caballeros templarios eran personas absolutamente religiosas, pero se ponían la armadura y luchaban. ¡Estaban locos! Creían totalmente en el cristianismo y en su mensaje. Sin embargo, en el campo de batalla eran personas totalmente bárbaras", dijo Hirst en una entrevista.
Además, el creador de "Vikingos" aseguró en conversación con Variety que estamos a las puertas de presenciar una batalla nunca vista en la serie: "Lo primero que reconstruimos en la primera temporada fue la gran sala de Kattegat. Es como el centro espiritual de la serie. Por supuesto, vuelve a eso porque también representa el centro de poder para la familia de Ragnar. Entonces, aunque la serie nos lleve a Marruecos y a Islandia, siempre regresarán a su base de poder".
"Y su base de poder es también su hogar espiritual. La batalla por Kattegat siempre va a ser intensa entre los hijos porque allí es donde gobernó su padre. A Ragnar no le gusó ser rey particularmente pero lo fue y ahora ellos lo quieren ser. Es una cosa de padre e hijo. Tienes que esperar a verlo hasta el episodio 5x10. Esa batalla por Kattegat es una de las cosas más impresionantes que hemos rodado hasta ahora", añadió.
