Cerca de tres décadas en el mundo de la música tiene detrás de sí Quique Neira, quien no deja de sorprender con novedades artísticas.
De su nuevo videoclip, de una segunda parte del álbum "La vida es una canción", de las ganas que tiene de presentarse en solitario en el Festival de Viña (actuó en el pasado en la Quinta Vergara con Gondwana) y de su vínculo con el fútbol en medio del Mundial de Rusia 2018, Quique se confesó con T13.cl.
Este 21 de junio estrenarás un nuevo videoclip, de la canción “Tus huellas”, filmado en Nueva York, ¿cómo se generó esta producción audiovisual y la idea de llevarla a cabo en la llamada Gran Manzana?
-Cuando niño escuchaba "Pedro Navaja" y alucinaba con lo de las "8 millones de historias"; el día que mataron a Lennon, yo caminaba de la mano de mi mamá y jamás pude olvidar que eso que puso tan triste a mi vieja ese día había ocurrido en aquella ciudad, La Gran Manzana; y el día que Marley colapsó fue en el Central Park… en fin, son millones de historias realmente. Tal vez por eso incluí esa idea en la primera canción que escribí y que sonó en radios, en 1995, "Mamá yo quiero", de la primera banda en la que participé, Bambú. Dicha canción dice en una parte de su letra: “Quiero una historia como en ciencia ficción, ser súper star, jovencito en un cuento. Rico y famoso de Chile a Nueva York, poder volar y volver a terreno”. Esta canción se volvió profética de mi propia experiencia como artista. Tal vez lo deseaba inconscientemente, no lo sé, pero muchas de las cosas que dije en esa letra terminaron ocurriéndome, solo faltaba materializar mis distintas pasadas por Nueva York y registrarlo en un audiovisual que diera cuenta de ello y que quede en el tiempo para dar fe de que de algún modo logré esa meta también. Fui a hacer un concierto a esa ciudad en enero del 2017, entonces aproveché de hacer realidad ese sueño de niño/joven, dándole más carácter de "magia decretada" a lo que escribí para aquella primera canción mía que logró otra meta de mi carrera, una de las primeras: llegar a sonar en radios.
¿Qué fue lo más complejo de esta experiencia de grabar en Nueva York y qué es lo que más destacarías de ella?
-Fue complejo, sí, pleno enero y queríamos filmar con nieve… ¡y nevó desde el día que llegué! Tremenda tormenta me esperaba al llegar. Con 10 grados bajo cero se realizaron la mayoría de las filmaciones en varias de las locaciones. ¡No había pasado tanto frío en mi vida! Y destaco el trabajo de Percy Céspedez, el director, y Alexei Vásquez, el productor, quienes hicieron un trabajo de primera, no por nada son considerados entre los mejores equipos realizadores de videoclips en toda Latinoamérica. El resultado avala esa reputación que les precede. Es un muy buen trabajo realmente. No todos los días, además, puedes filmar un clip en un escenario tan increíble como lo es la ciudad de Nueva York. Quedará para la posteridad esa imagen mía en aquel lugar, al ritmo de una canción que compuse una mañana de invierno acá en mi país, soñando con que su melodía sonara en cualquier lugar del mundo.
¿Cómo evalúas la recepción del público de tu última producción, "La vida es una canción Vol. 1"?
-La gente que escucha mi música me lo ha agradecido, pues es un disco con sentido, con historia, con ejercicio de memoria, con rescate de canciones importantes de mi vida como autor. Pero también tiene mucho milagro creativo nuevo. "Latinoamérica libre" fue el primer video del disco, filmado en Chile y Perú, y logramos un gran resultado. Al público le ha gustado escuchar una canción consciente… despierta a la realidad que se está viviendo. Fue uno de los momentos más potentes en mi reciente pasada por Lollapalooza 2018 hace unos meses. Y "Tus huellas" también ha sido recibida con gran entusiasmo y la salida de su clip consolidará esa preferencia del público reggae y más.
¿Qué más se viene en los próximos meses?
-En los meses próximos lanzo "Simplemente", tercer single del disco, que ya tiene su video listo. Esta última canción ha despertado gran interés del público en redes sociales aún sin salir oficialmente como single. Tendrá mucho éxito, gustará un montón pues es una de las mejores canciones que he escrito, con un sentimiento que al escucharla por primera vez inmediatamente se descubre, eriza la piel. Mientras ese single esté sonando, en unos meses más, estaré terminando de grabar y mezclar el Volumen 2 de este concepto de "La vida es una canción" y que espero lanzar durante el próximo año. Será mi décimo disco, creo… en general, son tiempos movidos, estoy grabando dos discos simultáneos por estos días, el mencionado antes y un EP con covers cuyo primer corte promocional espero sacar a la luz a fin de este año y que, por las canciones que elegí, no dejará a nadie indiferente.
¿Cómo visualizas hoy el presente del movimiento reggae en Chile?
-Se está haciendo buena música en general. Tengo la costumbre de escuchar la más música nueva posible de otros artistas y me doy cuenta de que hay mucho talento, pero, lamentablemente, no hay mucha unidad. Existe camaradería entre algunos artistas, pero también hay bastante arrogancia. "Humos en la cabeza". Así literal. Yo me llevo bien con quienes me tratan con cariño y el respeto que merezco, que me he ganado luego de 27 años haciendo canciones.
Proyectando el verano, ¿sientes que el Festival de Viña tiene una deuda contigo? ¿Te gustaría ser parte de dicho evento?
- Sí, definitivamente creo que es una deuda pendiente estar en el Festival de Viña. Espero en algún momento saldarla, lo merezco. Mi trayectoria de 27 años me avala y mi vigencia y las repercusiones que mi música ha tenido a nivel internacional. Siendo productor musical, músico, autor y compositor, creo que podría dar una opinión válida como parte de un jurado en una competencia de canciones, por ejemplo, algo entiendo del tema. Eso si es que no me quieren llevar como artista al line up. Pero, además, es cosa de ver el efecto que tienen mis presentaciones en vivo y cómo vibra la gente con mi música. Me gustaría ser parte, por supuesto, si ese ha sido mi concepto siempre: que el reggae llegue a la mayor cantidad de gente posible, porque es música positiva, inspiradora, que aporta y que hace falta.
"El fútbol y el reggae tienen una relación cercana"
Entramos ahora de lleno a una época futbolera, a propósito del Mundial de Rusia, y conocido es tu gusto por el fútbol. ¿Te consideras un viudo del Mundial?
-Amo el fútbol. Tengo recuerdos de algún partido de Argentina 78, que viví junto con mi abuelo Enrique, quien me bautizó como Quique Neira. Vi en vivo -por TV- el "mejor gol de la historia de los mundiales", de Maradona en México 86, vi a mi ídolo Caszely perderse el penal en el 82, lloré de emoción cuando volvimos con Za-Sa el 98, me deslumbró la sabiduría y espiritualidad de Bielsa, vi a la Roja en dos mundiales y ganar las Copas América y mordí la rabia cuando no clasificamos ante Brasil, aunque yo sabía que eso pasaría porque Pizzi siempre me pareció un pusilánime. No es la primera vez que no vamos a un Mundial, el mundo no se acaba en Rusia, volveremos. El fútbol, como la vida, da revanchas y las penas del fútbol se pasan con fútbol.
¿Qué te parece que Messi haya dicho que Gondwana -banda de la que tú eres su principal referente y de la que fuiste líder- es una de sus favoritas?
-Dejé ese proyecto hace 15 años, no me corresponde ya referirme al respecto. Pero sí puedo decir que el fútbol y el reggae tienen una relación cercana. En Chile se sorprenden con estas cosas, pero la verdad es que en otras latitudes es una realidad sabida. Zlatan ha dicho muchas veces que su música favorita es el reggae, Ruud Gullit y su estilo con dreadlocks en los ochenta, Bob Marley y su declarado amor por la pelotita... se dice que era muy bueno con el balón por cierto... en fin. Igual Messi es un gran jugador y le deseo suerte en el Mundial, tiene un gran desafío por delante en esta Copa del Mundo Rusia 2018.
