Hasta que el abogado "Will Truman", interpretado por Eric McCormack, apareció en las pantallas de NBC en septiembre de 1998 como protagonista de "Will & Grace", los personajes gay de las series de televisión estaban eternamente relegados al segundo plano. Generalmente como un recurrente recurso cómico que no tenía mayor importancia en la trama además de hacer reír por su amanerado comportamiento.
Pero la aparición de "Will & Grace" -que vuelve con nueva temporada este miércoles a las 22:00 horas a Fox- marcó un hito en la televisión mundial. Esto, porque dos de los personajes principales eran gay -"Will" y su vecino "Jack"- y su vida amorosa era parte central de la trama más allá del factor comedia.
Además, la serie fue un éxito tanto de critica (ha ganado 15 premios Emmy) y de audiencia, un punto que ayudó a que la producción probara que la temática podía atraer a un público masivo.
Esto es algo clave, porque el año anterior al estreno, 1997, había quedado en duda debido a que cuando el personaje de Ellen Degeneres en "Ellen" "salió del clóset", se desplomaron los ratings del programa.
Una vez que se disiparon esas dudas, en la TV se empezaron a ver casos como la versión británica y estadounidense de "Queer as Folk" centrado en un grupo de amigos gay y "The L Word", sobre amigas lesbianas, aparte de otra producción que ha logrado tanto éxito como "Will & Grace", los personajes de "Cameron" y "Mitchell" de "Modern family".
Hoy el tema parte del mundo televisivo de un modo tan constante, que incluso es difícil recordar que alguna vez no fue una aparición cotidiana.