Sin Bandera se despidió de Chile con un show repleto de romanticismo
Apenas se apagaron las luces, una cuenta regresiva que comenzaba en 01:18 minutos inició marcha atrás. Pasaron ocho años desde que Sin Bandera se presentara por última vez en Chile, también en Movistar Arena, y seis shows en nuestro país en las dos temporadas antes de la separación. Por eso, el "5, 4, 3, 2, 1" resonó de pura ansiedad. Porque empezaba un nuevo final, en el primero de los dos conciertos que la agrupación daría en tierras locales.
Noel Schajris y Leonel García aparecieron de inmediato sobre el escenario -junto a ocho instrumentistas y dos coristas-, al son de "Una última vez", nombre del EP con el que decidieron bajar el telón del dúo de manera definitiva.
Detrás, una muralla LED simulaba un teatro elegante. Adelante, un público transversal, que remeció el recinto gracias a sus gritos cuando oyeron "Y llegaste tú", uno de los hits de la pareja argentina-mexicana. Y que aún no terminaba de acomodarse cuando ya habían pasado las dos primeras canciones de un setlist repleto de romanticismo y rico en éxitos radiales.
Porque para fortuna de Sin Bandera, cada una de sus canciones sigue latiendo en el público local. Cada año que pasa, se tornan imprescindibles del catálogo amoroso musical, aunque no hayan podido reposar desde que Schajris y García se separaran por primera vez en 2008.
Y la postal de los gritos desaforados se repetiría un sinfín de veces, desde "En esta no", como una canción para inmolarse por WhatsApp, anhelando historias que nunca ocurrirán; hasta "A, b, c", contrastando el amor con sus caídas.
De cuando en cuando, los hombres de "Mientes tan bien" bromearon entre ellos, jugaron con el público y hasta filmaron con una cámara GoPro a los 12 mil asistentes que llegaron al Movistar Arena. Además, en un setlist carente de variantes, secuestrado por las baladas, rompieron la monotonía con el sonido caribeño de "Junto a ti" y con un tibio homenaje al funk llamado "Sobre mí".
Antes de comenzar a soltar un hit tras otro.
"Sirena" -con Schajris paseándose entre el público-, "Suelta mi mano", "Mientes tan bien", "Que lloro", "Kilómetros" y el final con "Entra en mi vida" -el éxito que los lanzó a la fama-, sería la música del término entre Chile y Sin Bandera.
Sin tener voces especialmente únicas (aunque bien complementadas) ni montar un show de excepción, el dúo supo siempre en qué medida musicalizar el romance y sus formas. También supo en qué momento volver y decir definitivamente adiós.