No han sido semanas fáciles para el humorista nacional Ricardo Meruane tras su nuevo traspié vivido sobre el escenario de la Quinta Vergara. Casi en shock, el comediante se recluyó en el Cajón del Maipo para “desconectarse” de las críticas y optar por su sanidad mental.
“Uno se cae una vez, se cae dos veces y es una característica del chileno que no te rindes nunca, estás en lo tuyo y le das no más'', asegura entrevista con La Cuarta, la primera tras su show.
''Me vino un bajón, el cúlmine de toda la pega fue la actuación del Festival. Uno está tres meses antes de eso trabajando todo el día, 24 horas, buscando los mejores chistes, preparando, estás todo el día conectado. Después de Viña me fui a negro, se me agotó la pila y no me podía desconectar, pasé un par de días medio insomne y ahí me vino el bajón'', relata.
“Me recomendaron que me desconectara de todo, de mí, de la prensa, de estar todo el día procesando porque esta pega no tiene horario. De repente me hacía falta una desconectada y eso fue lo que me recomendó el doctor, que me desconectara, que me fuera a mirar el techo, los árboles y estuve totalmente retirado tomando flores de Bach. Porque cuando estaba con la tensión estaba bien, cuando llegó el relajo me fui a negro”, cuenta.
Sobre sus planes a futuro el calvo es optimista. “Si llega a salir lo de la cumbre Guachaca y se da la oportunidad podría salir algo de humor. Podría llevar mi personaje clásico, la ''Roxy Sisisi''.
¿Posible regreso al Festival de Viña?
“Ahora no, pero yo me conozco, más adelante capacito que me entre el bicho y si encuentro que hay algo digno de mostrar, yo estaría feliz haciéndolo, no está desechado, el mundo es circular y da muchas vueltas y si el día de mañana se da de nuevo, ahí estaremos”.