A seis días de que el actor y presentador mexicano Renato López fuera encontrado muerto a balazos junto a su representante Omar Girón dentro de un auto en la zona de Jilotzingo, Estado de México, las autoridades revelaron que fue un ataque directo y que los asesinos los conocían.
Fuentes de la Procuraduría del Estado de México señalaron al diario El Universal que el cuerpo de López tenía 13 impactos de bala.
Los peritos policiales fundamentaron el conocimiento que los homicidas tenían de sus víctimas porque ambos tenían puesto el cinturón de seguridad y no se resistieron. También se estableció que participaron más de dos personas en el doble asesinato.
Pese a que en la localidad de San Juan Jilotzingo hay grupos de narcotraficantes locales, las autoridades han descartado que hayan participado carteles de droga en el crimen.
López y Girón fueron encontrados muertos la mañana del jueves 24 de noviembre en un auto en el municipio de Jitotzingo, Estado de México. La Policía pudo llegar al lugar cuando los vecinos reportaron un vehículo abandonado.
López, de 33 años, había sido reportado por su familia como desaparecido.
