[ESTRENO] La banda chilena Niños del Cerro presenta su nuevo single "Flores, Labios, Dedos"
En alguna reseña musical que quedó olvidada en sus recuerdos, a la banda chilena Niños del Cerro la llamaron "pop esquivo". Un término que les quedó gustando y que les hace sentido al presentar su nueva canción "Flores, Labios, Dedos". "Pasajes muy bonitos con arreglos bien delicados y otras cosas que son puro ruido, tomando un rumbo más mala onda. Piensas que te estamos entregando algo bonito y digerible, pero se va para otro lado y eso es un recurso que usamos harto musical y estéticamente", dice su líder Simón Campusano (24 años) a T13.cl.
El single del conjunto nacido en La Florida es el primero desde su llegada a comienzos de año a Quemasucabeza, el sello independiente que tiene en su catálogo a artistas como Gepe, Pedropiedra y Roja y Negro, uno de los proyectos de Ana Tijoux.
"Recién con esta canción y el disco que viene empezamos esta etapa nueva en la que ya estábamos hace un tiempo, pero el hecho de irnos a Quemasucabeza se siente como estar en un lugar nuevo. Es parte de un proceso que viene de antes, pero parece recién ahora que estuviese empezando", explica el guitarrista y cantante. Porque en 2017 publicaron el primer tema que compondría el inminente sucesor de "Nonato coo" (2015), pero bajo el alero de Piloto, su anterior casa discográfica.
"Flores, labios, dedos" habla de las drogas y más precisamente de la marihuana —y "de no sentirse cómodo, de que en realidad no me gustan", cuenta el músico— con la excusa de una relación amorosa, en una estrategia que ha generado fidelidad en el público adolescente: "Quizás por ese mismo curso, esa misma construcción es porque ellos enganchan con nosotros. Hace poco alguien me decía que nosotros estábamos influenciando a bandas más chicas, y no me había dado cuenta, pero obvio que hay cabros que (nos vieron) cuando empezamos a tocar, ahora tienen 20 y tienen bandas y deben estar empezando a estudiar y es bonito ver ese proceso".
"Es súper choro ir a una tocata y que te digan 'oh, mi banda está súper influenciada por ustedes', y es como 'pero si llevamos súper poco'", añade Campusano, reflejando ese vínculo horizontal con sus fanáticos que se inició desde que empezaron a tocar en los patios de sus familiares y amigos.
"Era súper ridículo darnos color si estábamos tocando donde mi papá o en la casa de cualquier otro amigo. Optamos por eso porque nos parecía sentido común, cachai, pa' qué venir a tocar a lugares donde no nos estaban dando bola. Tenía sentido en ese momento, por eso tenemos esa relación", cierra el artista.
Niños del Cerro lanzará su segundo disco hacia el término del primer semestre. Antes, presentarán "Flores, labios, dedos" en mayo y ya preparan giras para la segunda parte del año.