Bastián García desde Miami
Es 1928 y en España las mujeres están tomando una relevancia nunca antes vista en el país, desatando las amarras en su manera de vestir, por una parte, y encabezando movimientos para conseguir la aprobación del sufragio femenino. Aunque en el intento de revolucionar cada uno de los aspectos de sus vidas, continúan sufriendo la represión de la sociedad. Entonces, la consigna es escapar y unirse en la búsqueda de nuevas oportunidades para el género.
En ese contexto deben sobrevivir "Las chicas del cable" —el nombre de la primera serie original de Netflix hecha en España y que se estrena el 28 de abril en la plataforma digital—, un equipo de operadoras de la compañía nacional de teléfonos que se hará fuerte desde ese lugar, intentando también dejar atrás su pasado y las ataduras impuestas.
"Es una serie que muestra a mujeres reales", dice a T13.cl la actriz Ana Fernández García. La madrileña interpreta a Carlota, una de las candidatas que se quedará con un puesto en la empresa que pretende revolucionar las telecomunicaciones.
La serie está ambientada en el primer tercio del siglo pasado, pero tiene varios guiños a la actualidad. "Hay un contraste en lo que es la imagen y lo que es el sonido, que creo es lo que impacta a primeras, pero luego hace que sea mucho más atractivo para el público más joven que es muy exigente con esas cosas y que las cosas de época puede echarlo un poco para atrás. El hecho de que sea de época dará igual, lo importante son las historias", añade la intérprete.
Dentro de esa relevancia está un relato que, guardando las distancias, no ha cambiado su fondo en estos 90 años. "La serie muestra una lucha universal de la mujer", agrega la actriz Ana Polvorosa, quien es Sara en la serie.
"Colabora con charlas respecto al derecho de las mujeres, sufragistas, feministas, defensoras de la mujer en esa época y segura de sí misma. Es fuerte a priori pero a medida que se desarrolla la historia se verán sus miedos, inseguridades y las cosas que tiene menos controladas", cuenta la nacida en Getafe.
"La década de los años 20 es una época de explosión y rotura de costuras de la mujer. Antes estábamos muchísimo más cohibidas y atadas y después hay un proceso de cangrejo, de volver hacia atrás, pero los años 20 se ven en la moda, en cómo empieza esa lucha del voto. Es una época de un boom de la mujer. Entonces, la reconstrucción del personaje es una documentación de esa época, de lo que ocurría a nivel social. Siempre hay una parte del personaje que va contigo", cierra Fernández.
