La conmovedora carta con que Ryan Reynolds despidió a un pequeño fan que murió de cáncer
Gracias a la fundación Make-a-Wish, Ryan Reynolds cumplió el sueño de un pequeño fan enfermo de cáncer, en un encuentro ocurrido hace tres años. Dolorosamente, Connor McGrath, el niño en cuestión, falleció a los 13 años víctima de la enfermedad.
El protagonista de "Deadpool" quedó tan conmovido que en su cuenta de Facebook publicó una sentida carta donde se despide de su valiente fanático.
"Durante tres años mi amigo Connor McGrath pateó al cáncer… Pero no sé cómo… Quizá el cáncer hizo trampas… Pero la pelea acabó hace dos noches. Ni en mis peores pesadillas puedo imaginar lo difícil que debe ser para sus padres, Kim y Gerald, ni para su familia. Connor tenía 13 años. Pero este niño… Era inteligente. Era divertido. Y no solo divertido 'como un niño' o divertido 'como una persona que lo está pasando mal'", expresó la estrella de Hollywood.
Asimismo, dijo que Connor se fue demasiado pronto y que es imposible aceptarlo.
"Connor era un gran amigo, un gran hijo y una luz para todos aquellos que tuvieron la suerte de conocerle. Mientras pateaba al cáncer en las pelotas, hacía que todo el mundo se riese. Incluido el personal que cuidaba de él en el Hospital Infantil de Edmonton", continuó Reynolds.
"Fue la fundación Make-A-Wish la que nos unió. No se lo puedo agradecer lo suficiente. En serio, gracias. Gracias a su deseo, Connor fue una de las primeras personas en ver Deadpool. Viajé hasta Edmonton, Alberta, para sorprenderlo con uno de los primeros montajes de la película. Todavía había escenas en las que se veían los cables, bromas que no estaban afinadas (y tampoco lo están ahora) y muchas pantallas verdes. A Connor no pareció importarle. Nunca me he sentido tan afortunado de haber interpretado a Wade Wilson (Deadpool)", agregó en la carta.
Uno de los motivos por el que se conocieron fue porque el niño era fanático de Deadpool: "En cierto modo, él ERA Deadpool. O al menos, todo lo que Deadpool quería ser: capaz de vivir en armonía con el dolor, sin miedo, cariñoso y con un sentido del humor indecente (¡indecente!). Ojalá se hubiese quedado más tiempo con nosotros".
"Volví a Edmonton seis semanas después y ojalá pudiese decir que las cosas estaban mejorando. Después de mi visita, no sabía si estaba diciendo adiós o hasta luego. Aquí, ahora, me doy cuenta de que eran las dos. Si quieren donar a la fundación Make-A-Wish, les puedo garantizar que su dinero va a llegar a un sitio jodidamente bueno. Esta gente no apesta. Son héroes. Te veo en el camino, Connor", cerró el actor.
Un noble acto por parte de Ryan Reynolds.