Una de las historias virales de la semana mostró cómo una artista llamada Kelsy Karter se tatuaba en su mejilla a su ídolo Harry Styles, el ex miembro de One Direction.
"Mamá, mira lo que me hice", había escrito la cantante nacida en Nueva Zelanda con base en Estados Unidos cuando compartió los resultados en su cuenta de Instagram.
Sin embargo, todo era una exitosa campaña publicitaria para estrenar su nuevo single llamado, justamente, "Harry".
"Cómo sacudir al mundo entero por solo US$ 300", tituló Karter su video explicativo de cómo hizo tal broma, refiriéndose al monto que le costó grabar el videoclip.
"¿Qué habrían hecho las leyendas del rock que me inspiraron en 2019?", escribe en su video explicativo. "Vamos a tatuar la cara de Harry Style... en mi cara", añade.
"Para lograr esto, necesitábamos un artista de tatuajes famoso para que se viera real ... Llamamos a Romeo (Lacoste)", el tatuador que apareció en su publicación original el domingo pasado.
Al margen de esta estrategia, Kelsy Karter escribió una canción para Zayn Malik que nunca se lanzó. Además, dice estar desesperada por grabar un tema para el próximo disco del hombre de "Sign of the times".
