Este lunes se conoció la noticia de la muerte de la actriz Amanda Peterson, quien falleciera a los 43 años dejando atrás una carrera marcada por la cinta ochentera Novia se Alquila, donde compartió roles con Patrick Dempsey. Y ahora ha salido a la luz el pasado turbulento de la fémina.
Según la revista People, la artista fue detenida en múltiples oportunidades por cargos donde destacan el porte de estupefacientes, riña y ser sorprendida en estado de ebriedad. O sea, una imagen diametralmente opuesta a la estampada en su paso por la pantalla grande.
Por ejemplo, en 2010 fue llevada a una estación policial de Fort Collins, Colorado, luego de insultar y agredir físicamente a una mujer. En este caso, el policía que tomó el procedimiento aseguró que Peterson se encontraba en estado de ebriedad.
De la misma manera, se cuentan causas a su nombre en 2000, 2003 y 2005. Precisamente, en este último año pasó tres meses tras las rejas, mientras que en 2012 la policía la detuvo por posesión de drogas.
A pesar de todos estos antecedentes, la madre de la actriz aseguró que su deceso no está relacionado con las drogas, señalando como posible causa de muerte la apnea del sueño, enfermedad que padecía. Los resultados de la autopsia serán entregados la próxima semana.